Primero llegaron los insultos y las amenazas. "Puta", "infiel", le lanzaron el pasado 5 de enero dos individuos que hablaban en árabe. Luego, han pasado a la acción. La actriz y dramaturga de origen argelino Rayhana fue agredida el pasado martes en plena calle, en un barrio popular de París, cuando se dirigía hacia el teatro de la Maison des Métallos, donde se representa hasta hoy su obra A mi edad, todavía me escondo para fumar.De nuevo dos individuos, no está claro si los mismos, le lanzaron un líquido inflamable a la cara - gasolina o disolvente-y luego una colilla encendida, con el objetivo de quemarle el rostro. Afortunadamente, el cigarrillo no llegó a prender y la escritora pudo huir y refugiarse en el teatro.
El Gobierno francés ha reaccionado con una gran indignación contra lo que ha calificado de "agresión odiosa" y ha expresado su solidaridad con la artista, que desde ese día ha contado con protección. Rayhana, de 45 años, que en el año 2000 abandonó
Argelia ante el acoso islamista para refugiarse en Francia, subió al escenario el mismo día de la agresión y expresó su determinación de seguir con las representaciones - que en principio acaban hoy-para mostrar a sus agresores que no tiene miedo.
La sección antiterrorista de la policía ha abierto una investigación ante la hipótesis, más que probable, de que el ataque haya sido obra de militantes integristas. La policía sospecha que las amenazas y el posterior ataque están ligados al contenido de la obra de teatro de Rayhana - donde también actúa-,en la que nueve mujeres argelinas aprovechan la intimidad de un hammam para explicar sus historias personales y hablar libremente de moral, religión o sexo. Al hilo de sus vivencias, sale a la luz la violencia política y religiosa, así como la opresión machista, en la Argelia de los años negros.
Se da la circunstancia de que el teatro de la Maison des Métallos, situado en la calle Jean-Pierre Timbaud (en el multicultural barrio de Belleville), está justamente enfrente de la mezquita de Omar Ibn al Khattab, un centro de oración reputado por su integrismo. La misma calle, invadida recurrentemente por los fieles durante la plegaria de los viernes, es un reflejo del avance islamista en este sector del barrio, con tiendas donde se venden burkas y velos islámicos completos (niqab).
16-I-09, Ll. Uría, lavanguardia