Nuevo roce entre el Vaticano y los judíos. Otra vez la polémica figura de Pío XII como arma arrojadiza, como motivo de agravio. Los líderes de la Iglesia católica se defienden con vehemencia de los ataques por el escándalo de la pederastia, pero en su respuesta vuelven a irritar a los hebreos con comparaciones que estos consideran provocadoras y fuera de lugar.
Si el Viernes Santo fue el predicador de la Casa Pontificia, el franciscano Raniero Cantalamessa, quien enfureció a los judíos, al parangonar las críticas de estos días a Benedicto XVI con los peores episodios del antisemitismo, ahora ha sido el cardenal Angelo Sodano quien ha encrespado los ánimos en una entrevista con L´Osservatore Romano. El ex secretario de Estado del Vaticano y decano del Colegio Cardenalicio sostiene que al Papa se le ataca porque "encarna verdades morales (sobre la familia y el derecho a la vida)" que no gustan a determinados sectores, y éstos usan como excusa "las carencias y los errores de los sacerdotes" para arremeter contra Benedicto XVI.
Según Sodano, la historia se repite: "Ahora le blande contra la Iglesia la acusación de pederastia. Primero fueron la batalla del modernismo (corriente teológica reformista de finales del siglo XIX y principios del XX) contra Pío X, luego la ofensiva contra Pío XII por su comportamiento durante el último conflicto mundial y, finalmente, contra Pablo VI por Humanae vitae (encíclica contra la píldora anticonceptiva)".
Varios dirigentes judíos consideraron muy inadecuada la comparación. Amos Luzzatto, ex presidente de la Unión de Comunidades Hebreas Italianas, puntualizó que "no existe ninguna agresión de parte hebrea contra Pío XII" sino una "crítica histórica y cultural (por su silencio durante el Holocausto) y como tal se entiende". Para el rabino Giusseppe Laras, presidente honorario de la Asamblea Rabínica Italiana, el parangón "es una maniobra equivocada, desesperada, que nace de la dramática confusión en la cúspide de la Iglesia". Según Laras, traer a colación a Pío XII deja entrever que tras el escándalo de la pederastia "estamos nosotros, los hebreos, que movilizamos a la opinión pública contra el Vaticano".
Sodano ya protagonizó un acto sin precedentes, al inicio de la misa de Resurrección, el domingo pasado, al leer un mensaje de solidaridad entusiasta con el Papa y tildar de "murmuraciones" las noticias que día a día aparecen sobre el escándalo. Ante L´Osservatore Romano va más allá y habla de un "conflicto cultural", término muy similar al de "guerra cultural" usado por el vaticanista estadounidense George Weigel, biógrafo de Juan Pablo II, en una reciente entrevista con el diario turinés La Stampa.
8-IV-10, E. Val, lavanguardia