la Unión expedientará a Francia por discriminación ´racial´

"Esto es una vergüenza". La comisaria europea de Justicia, Viviane Reding, resumió ayer con estas contundentes palabras la expulsión de gitanos por parte del Gobierno francés. El Ejecutivo comunitario reconoce sin tapujos que los argumentos de Sarkozy para defender su política hacia el colectivo romaní no convencen. Apenas cinco días después de que el Parlamento Europeo exigiera que se ponga punto final a las deportaciones, Reding anunció su intención de abrir un expediente a Francia por violar la directiva europea sobre la libre circulación de personas. "La discriminación basada en el origen étnico o racial no tiene cabida en Europa", aseguró la vicepresidenta de la Comisión.

Bruselas se había mostrado hasta ahora muy comprensiva con el Ejecutivo francés. Su ministro de Inmigración, Eric Besson, visitó Bruselas a finales de agosto para argumentar las expulsiones y parecía que había logrado convencer a Reding. Tanto la comisaria como el jefe del Ejecutivo comunitario, José Manuel Durão Barroso, se mostraron condescendientes con Francia en el debate de la semana pasada en la Eurocámara. Hubo mucha retórica pero poca crítica.



¿Qué ha cambiado para que la comisaria haya dado este giro en su discurso? La circular interna del Ministerio del Interior francés fechada el 5 de agosto y filtrada el pasado fin de semana, en la cual se pide expresamente a la policía el desmantelamiento de los poblados gitanos, ha puesto en evidencia que se trata de expulsiones por razones étnicas. Reding dijo sentirse "engañada" por Besson. "Es escandaloso que una parte del Gobierno francés venga y diga algo y otra parte del Gobierno haga lo contrario en París", aseguró. Para abrir el procedimiento se necesita el visto bueno del colegio de comisarios. Reding dijo que va a pedir a Barroso que tramite el expediente por la vía rápida, unas dos semanas. También ha pedido por carta nuevas explicaciones a París, pero no confía en una respuesta satisfactoria. "Estoy convencida de que la Comisión no tendrá más opción que abrir un expediente contra Francia", declaró. Si ningún comisario se opone, Bruselas podría anunciar antes de fin de mes la apertura del expediente por la "aplicación discriminatoria" de la directiva de libre circulación.

El gobierno Sarkozy recibió con sorpresa las palabras de Reding. "No es con este tipo de declaraciones como se mejora la situación de los gitanos", dijo un portavoz. Si el Elíseo se niega a corregir la situación, el caso podría acabar ante la justicia europea.

15-IX-10, L. Forès, lavanguardia