"La relación entre Turquía y la Unión Europea puede encontrar otras vías de adhesión", dijo ayer Nicolas Sarkozy en su visita a Ankara, la primera de un jefe de Estado francés en 19 años. Aunque se pronunciara a favor de continuar las negociaciones de adhesión a la UE, Sarkozy dejó claro su rechazo a Turquía como miembro de pleno derecho en Bruselas. El primer ministro turco, Recep T. Erdogan, juzgó esta postura como "absolutamente inadecuada" y rechazó un compromiso que no sea la plena membresía en un medio local. 26-II-11, R. Ginés, lavanguardia