LOS RADICALES ITALIANOS PIDEN QUE EL GOBIERNO DECLARE EN EL PARLAMENTO SOBRE EL ACUERDO CON GADDAFI
17 de septiembre de 2008: “En cuarenta años de poder absoluto, la dictadura del coronel Gaddafi se ha caracterizado por la persecución de toda forma de disidencia política, por la represión sistemática de la libertad de opinión individual y de las asociaciones no reconocidas por el régimen, por la ausencia absoluta de órganos de prensa independientes, por el encarcelamiento o la desaparición de los opositores políticos, por el empleo de tribunales secretos y la celebración de juicios a puerta cerrada y por el recurso a la pena de muerte”. Esto se puede leer en el dossier “Los Derechos Humanos según Gaddafi, con quien Italia ha suscrito un Tratado de Amistad, Patrocinio y Cooperación”, que ‘Que Nadie toque a Caín’ y el Partido Radical han presentado hoy en una conferencia de prensa en el Senado italiano.
“Reclamamos que el ministro de Exteriores Franco Frattini declare en el parlamento acerca de los contenidos del reciente acuerdo entre Italia y Libia, sellado en agosto entre el primer ministro Berlusconi y el líder libio Muhammar al-Gaddafi”, ha solicitado el senador radical Marco Percuca durante la conferencia, en la que también han tomado la palabra las parlamentarias radicales Elisabetta Zamparutti y Donatella Portelli, el secretario de ‘Que Nadie toque a Caín’ Sergio D’Elia y el presidente de la Asociación Italiana para Relaciones Italo-Libias, Leone Marsa.
“Hay aspectos del tratado –prosiguió Perduca- que la opinión pública desconoce, así como el parlamento, que tendrá sin embargo que ratificarlo, dado que es un tratado internacional”.
Elisabetta Zamparutti, diputada radical, subrayó que “en 2007, en Libia, han sido ejecutadas al menos nueve personas, entre ellas cuatro nigerianos. En los primeros dos meses de 2008 se habían practicado ya seis ejecuciones, de ellas cinco de ciudadanos extranjeros”. “En 2007 –prosiguió Zamparutti- Libia resolvió a su manera, secuestradora para cobro de rescate y odiosa, lo que podemos definir como un caso internacional de ‘precio de la sangre’, en el que fueron implicados cinco enfermeras búlgaras y un médico palestino, condenados a muerte bajo la falsa acusación de haber infectado con el virus de VIH a 426 niños”. Un caso que sólo se resolvió con una indemnización de millones de euros enviados a Libia”.
“Con esta dictadura – ha dicho Sergio D’Elia- Italia ha sellado un pacto oneroso económicamente para el presente y para el futuro, aunque el escándalo más grave es que ni la opinión pública ni el parlamento italianos, ni los socios de la Unión Europea ni los aliados del Pacto Atlántico, hayan sido informados de la iniciativa bilateral ni de los contenidos materiales del acuerdo, que tendrían no pocas implicaciones en el sistema de alianzas y lazos internacionales de nuestro país”.
Sobre este asunto, los parlamentarios radicales elegidos en las listas del PD han presentado a la Cámara una interpelación urgente al gobierno italiano.
18-IX-08, handsoffcain newsletter