Valerio Federico, miembro del Comitato Nazionale di Radicali Italiani y secretario de la Associazione Enzo Tortora – Radicali Milano, y Michele De Lucia, tesorero de Radicali Italiani:
El Vaticano, del lado de los torturadores: en 1252, con la bula Ad extirpanda, Innocenzo IV autorizó el uso de la tortura y Giovanni XXII, al inicio del siglo XIV, extendió los poderes de la Inquisición en la lucha contra la llamada "brujería". Ahora, en 2008, el Estado Ciudad del Vaticano prosigue estas maneras bajo nuevas formas, legitimando el uso de la tortura (y de la Pena de Muerte) contra la homosexualidad por parte de los varios regímenes inquisidores esparcidos por el mundo: entre teocracias se entienden.
El Estado absolutista vaticano, con la toma de posición de ayer contra la despenalización del delito de homosexualidad, asume una ulterior posición de inaudita ferocidad...
Una vez más tenemos la demostración de que sólo la laicidad de los Estados y de las instituciones internacionales puede impedir toda forma de discriminación, especialmente cuando ésta tiene motivaciones religiosas (o presuntamente tales). Si errar es humano, perseverar es Vaticano.
2-XII-08, notizieradicali