diversas oposiciones sirias

Qué hacían un islamista de los Hermanos Musulmanes, un marxista ateo, una alauí laica, un empresario con negocios en Nigeria y un kurdo con turbante en un balneario turco? No es un chiste, sino una estampa de la primera reunión que celebró la oposición siria, el pasado junio, en Antalya.

A punto de cumplirse un año de la revuelta contra Bashar el Asad, la oposición sigue siendo un colectivo fragmentado, que no ha sabido ponerse de acuerdo sobre la estrategia para derrocar al régimen. A las brechas generacionales, ideológicas, étnicas o religiosas hay que sumar el recelo de la oposición interna hacia los que llevan años en el exilio.

CONSEJO NACIONAL SIRIO En la conferencia de Antalya se pusieron las bases del Consejo Nacional Sirio (CNS), fundado finalmente en octubre, también en Turquía, siguiendo el ejemplo de los rebeldes libios, cuyo Consejo Nacional de Transición fue decisivo para encauzar el apoyo internacional y derrotar a Gadafi.

A su frente está Burhan Galiun, director del Centro de Estudios Contemporáneos Orientales de la Sorbona, que llevaba años reclamando la transformación democrática del mundo árabe.

Aunque el CNS se declara "abierto a todos los sirios" y califica el enfrentamiento étnico o religioso como una estrategia de división del régimen, entre los diez miembros de su comité ejecutivo sólo hay un cristiano y ningún alauí, la minoría chií a la cual pertenece el rais, Bashar el Asad.

No es el único problema de representatividad. En sus filas hay gente salida de los comités de coordinación local (que han liderado y documentado las protestas en Siria), pero la mayoría de sus 310 miembros viven en el exilio desde hace años. También hay tensiones entre el bloque liberal y laico y los islamistas, liderados por los Hermanos Musulmanes. Y los kurdos reclaman más peso.

LA OPOSICIÓN ARMADA Formado en agosto por desertores del ejército y con base en Turquía, el Ejército Libre Sirio (ELS) ha dejado claro que no se siente representado por el CNS, uno de cuyos principios fundacionales es "mantener el carácter no violento de la revolución". El ELS lanza ataques cada vez más potentes contra el régimen, incluso en Damasco. Su comandante, el ex coronel de las fuerzas aéreas Riyad al Asaad, asegura disponer de 15.000 hombres, pero los analistas rebajan la cifra a 7.000. Además, señalan que no controlan a muchas de las milicias que dicen pertenecer al ELS.

Por otra parte, como se ve en el asedio de Homs, tiene un armamento muy limitado, incapaz ante los tanques y misiles del régimen y sus 200.000 soldados.

EN SIRIA El CNS ha topado también con la oposición izquierdista y laica interna, que no quiere mezclarse con los Hermanos Musulmanes y ha organizado su propio Comité de Coordinación Nacional. Liderado por el veterano disidente Husein Abdul Azim, incluye a tres partidos kurdos y se opone frontalmente a cualquier intervención militar extranjera, ni siquiera bajo la fórmula de zona de exclusión aérea utilizada en Libia, como defienden sectores del CNS. El diálogo con el régimen es otro punto de desencuentro: los opositores internos creen que la solución pasa por la mesa de negociación.

ISLAMISTAS La represión contra los Hermanos Musulmanes ha sido mucho más dura en Siria que en Egipto - desde 1980 la mera pertenencia es castigada con la pena de muerte-,lo que explica que la cofradía esté aquí menos organizada. En Alepo o en Damasco, por ejemplo, apenas tienen seguidores. Sus líderes, muchos de ellos exiliados en Occidente, aseguran que su modelo de estado es el turco, pero las minorías religiosas y los laicos no se fían.

25-II-12, red, lavanguardia

El opositor Consejo Nacional Sirio se divide al escorarse hacia el islamismo

Documento con fecha miércoles, 22 de febrero de 2012. Publicado el jueves, 23 de febrero de 2012.
Autor: Agencia Efe.Fuente: Público.

El Consejo Nacional Sirio (CNS), un organismo que intenta representar a la oposición que lucha contra el régimen de Damasco, se está fragmentando entre acusaciones de escorarse hacia el islamismo.

En una conferencia de opositores al régimen sirio que arrancó hoy en Estambul, el opositor Amer Kadro, coordinador de la cita, confirmó a Efe la escisión de uno de los personajes fundadores del Consejo, Ammar Qurabi.

El periódico turco "Hürriyet Daily News" publicó hoy unas declaraciones de Qurabi, en las que anuncia su salida del CNS y se presenta como dirigente del "primer partido no islamista" de la oposición siria.

Kadro, miembro del CNS, niega las acusaciones de fundamentalismo religioso y asegura que entre los nueve miembros de la Junta Directiva "solo hay uno afiliado a los Hermanos Musulmanes".

Sin embargo, otro participante en la conferencia, Adnan Bakira, responsable de Comunicación de la organización Juventudes de la Siria del Mañana, aseguró que el Consejo, e incluso la revolución siria, ofrece una imagen cada vez más islamista.

"Antes se gritaba en la calle "Siria Unida, ahora lo que más se escucha son eslóganes religiosos", criticó.

De hecho, casi todas las mujeres que acudían a la cita de hoy llevaban un estricto vestuario religioso y uno de los conferenciantes, Ibrahim Kuki, subrayó el carácter islámico de la contienda.

"Únicamente salimos a luchar para defender el credo del islam", aseguró Kuki en su intervención.

Bakira explicó que ese tipo de manifestaciones se producen porque "los jóvenes se ven frente a la muerte y buscan refugio en Dios", pero consideró fundamental que la revolución conserve el carácter plural de Siria, donde conviven musulmanes, cristianos, alauíes, drusos y otras religiones en una sociedad aconfesional.

Este activista, exiliado en Arabia Saudí, abogó por apoyar al CNS y ampliarlo para que acoja todo tipo de sensibilidades, y "se convierta en la verdadera voz del pueblo sirio, algo que ahora todavía no es".

También otros activistas recién exiliados, y parte de la red de coordinadores de las manifestaciones en Siria, han confirmado a Efe que "la presencia de los Hermanos Musulmanes en el Consejo es muy superior a su peso real en la sociedad siria".

La conferencia, que se clausura mañana, jueves, está respaldada por la organización humanitaria IHH, la más islamista de las grandes ONG turcas.

Amer Kadro detalló varias propuestas que la oposición siria quiere perfilar en esta reunión para presentarlas el viernes en la la Conferencia de los Amigos de Siria que se celebra el viernes.

Por una parte, pedirá a todos los países que expulsen a los embajadores sirios y retiren a sus propios diplomáticos de Damasco, para luego retirar el reconocimiento oficial al régimen del presidente sirio, Bashar Al Asad, y reconocer en su lugar al Consejo Nacional Sirio.

Por otra parte, todos deberían procurar enviar ayuda humanitaria a los refugiados, desplazados y heridos sirios, tanto dentro como fuera del país, y "utilizar todos los instrumentos a su alcance" para proteger a la población civil.

"Tras vetar las condenas a Asad en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, el pueblo sirio considera a Rusia y China cómplices de las masacres, pero estoy seguro de que los demás países pueden hacer mucho al margen de este veto", concluyó Kadro.