Flix: ¿imprudencia temeraria en extracción de basura química y radioactiva?

En un mes empezará la extracción de los 760.000 metros cúbicos de lodos altamente contaminados acumulados en el fondo del pantano de Flix (Ribera d’Ebre), en el río Ebro. Así lo detalla el plan de trabajo de los técnicos de Acuamed, la empresa estatal adjudicataria de los trabajos de limpieza, presupuestados en 165 millones de euros. El Gobierno del PP no quiere arriesgarse a perder la subvención de la Unión Europea, que costeará el 70% de la limpieza siempre que empiece este año.

El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, no está dispuesto a ceder ante las presiones de la Generalitat y la casi totalidad de alcaldes de la Ribera d’Ebre; un frente común, con la única voz discrepante del alcalde de Flix, que exige que antes de empezar a remover los vertidos se hayan finalizado todas las obras necesarias para garantizar el abastecimiento alternativo de agua de boca y riego, y poder responder a un posible episodio de contaminación. El denominado plan de restitución, acordado en el 2009 con inversiones de 57,3 millones, se ha ido demorando en parte por la precaria situación económica de la Agència Catalana de l’Aigua (ACA).

Según fuentes de Acuamed, en noviembre se iniciará el dragado de los primeros metros cúbicos de lodos tóxicos en fase de pruebas. En el caso de que se verifique que el sistema de extracción funciona, no habrá marcha atrás. Las órdenes del ministerio son las de trabajar con la máxima seguridad pero también con celeridad, para minimizar así el riesgo potencial.

Un sistema de dragas extraerá la basura química y radiactiva, que será tratada junto al río, en una depuradora. Los residuos, ya tratados, serán transportados en camiones a un vertedero a tres kilómetros del pantano.

Antes de empezar las tareas de limpieza, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) presentará al presidente del Consell Comarcal de la Ribera d’Ebre, Jordi Jardí (CiU), los planes de emergencia que se han diseñado junto a la Agència Catalana de l’Aigua para responder a la hipótesis de que se dispersen partículas contaminantes en el agua del río. Un encuentro que tendría que acabar con las reticencias de quienes se oponen al inicio de la extracción antes de finalizar el plan de restitución, que afecta a un total de 72 municipios.

Para los núcleos situados río abajo, junto a Flix, como Ascó, Tivissa o Móra d’Ebre, es una temeridad iniciar la extracción. La Generalitat recuerda que además de los 13 municipios que captan directamente el agua de boca y riego del río, del Ebro dependen más de medio millón de personas, incluidas ciudades como Tarragona, Reus o toda la Costa Daurada.

La limpieza de Flix, adjudicada en el 2007 a Acuamed, ha sufrido muchas demoras. En el 2004, un estudio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) puso al descubierto el vertedero de la empresa Ercros, antigua Erkimia, en el pantano, con metales pesados como el mercurio o el arsénico y contaminantes radiactivos. En diciembre del 2010, los entonces responsables de Medio Ambiente preveían que, como muy tarde, las labores de extracción de lodos altamente contaminados se iniciarían a principios de este año.

8-X-12, E. Giralt, lavanguardia