la muy patriótica (re)escritura de la Historia (de España) según Wert (¡y la educación -...- es obligatoria!)

Noticias criminología. España retrocede 50 años. Marisol Collazos SotoEl Ministerio de Educación tiene muy claro qué deben aprender los alumnos en clase. Tanto es así que el diseño del nuevo currículo escolar precisa hasta el último detalle los contenidos de historia, filosofía, literatura... en primaria, ESO y bachillerato. Así se desprende del borrador del decreto de contenidos curriculares que desarrolla la Lomce, más de mil páginas que confirman ese control férreo sobre todas las materias esenciales.

El currículo de la ley anterior, la LOE, apenas ocupaba una decena de páginas para cada materia. El de Francia raramente supera los cuatro folios, da indicaciones generales, y luego cada centro escolar decide cómo desarrollarlo. Pero la nueva ley educativa del PP, la Lomce, no deja lugar a interpretaciones ni añadidos.

“El estudio de la Historia de España es esencial para el conocimiento y comprensión no sólo de nuestro pasado, sino también de nuestro mundo actual. No menos importante es su carácter formativo...”. Es lo que dice la introducción del contenido curricular de de la Historia de España de 2º de bachillerato, según este borrador del decreto, expuesto a debate público hasta el 3 de enero y pendiente también de un dictamen no vinculante del Consejo Escolar del Estado. El ministro de Educación, José Ignacio Wert, siempre ha dicho que uno de los objetivos de la ley era homogeneizar los contenidos de las materias troncales. El Ministerio decidirá el 100% de su contenido, aunque las comunidades autónomas podrán complementarlo con materias propias. Pero luego están las revalidas a final de cada etapa. Este examen externo preguntará por los contenidos que Educación ha fijado, así que los profesores se centrarán en impartirlo, porque si los alumnos de ESO y bachillerato no superan estas pruebas no conseguirán el título...

Noticias criminología. Humor Wert. Marisol Collazos SotoUn primer análisis del nuevo currículo da algunas pistas de cómo el Gobierno quiere enfocar la enseñanza de la Historia. Tanto en la primaria (Ciencias Sociales) como en la ESO (Geografía e Historia), el temario abarca desde la prehistoria hasta nuestros días. Y no sólo establece los contenidos sino también los criterios de evaluación y lo que llama los “estándares de aprendizaje” (un concepto que según Ancaba “es extraño a la tradición pedagógica española e incluso europea y parece importado de currículos latinoamericanos”). Dentro de este último concepto, en la ESO se precisan propuestas de trabajo del estilo: “Realiza un mapa conceptual con los principales dioses del panteón egipcio”; “Concepción del parlamentarismo por Chamberlain y Goebbels”; “Distinguir entre contextos diferentes del mismo proceso, p. e. África sub-sahariana (1950s-60s) y La India (1947); “Utiliza el recurso Web para crear contenidos multimedia sobre la capacidad de interrelación de diferentes grupos periodísticos”...

En la Historia de España, de 2º de bachillerato, el documento divide esta materia en 12 bloques y 51 capítulos...

El informe que han elaborado los catedráticos de instituto señala que este currículo es de “un grado de detalle, concreción y dirigismo excesivos”. Y añade que ni tan siquiera los currículos previos a la Logse fueron “tan extremadamente detallistas”. Uno de los ejemplos que dan es el de la materia de Filosofía, del bachillerato. El currículo “llega a señalar explícitamente una relación de textos de determinados filósofos para ser comentados en la clase. Jamás ningún currículo anterior había llegado a este extremo. Quedaba a la libertad de cada profesor la elección de aquellos textos que le parecían más apropiados”. Ahora ya no.

El informe señala también que “la Historia de la Filosofía no es un repaso del pensamiento occidental, como era de esperar. Se limita a una selección impuesta de nueve filósofos elegidos ¿con qué criterio? (...) Respecto al programa aún vigente de la LOE se ha eliminado un filósofo de la talla de San Agustín, por ejemplo. (...) En el último bloque se incluye a Habermas ¿por qué este filósofo y no Heidegger o Popper o Bergson o Hannah Arendt...?

23-XII-13, M.Gutiérrez/J. Playà Maset, lavanguardia