la periodista congoleña Caddy Adzuba, merecido Premio Príncipe de Asturias
La periodista congoleña Caddy Adzuba aseguró hoy a Efe sentirse "satisfecha" tras haber sido distinguida con el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia 2014 y recordó que la violencia sexual es un "problema mundial" que necesita la implicación de la comunidad internacional.
"Tengo un sentimiento de satisfacción porque (gracias a este premio) el trabajo que he hecho se podrá conocer a nivel internacional, será comprendido y se continuará", afirmó en una entrevista telefónica con Efe desde Bukavu (en el este de la República Democrática del Congo), donde trabaja para Radio Okapi, emisora vinculada a Naciones Unidas.
El jurado concedió hoy este galardón a la periodista, de 33 años de edad, como "símbolo de la lucha pacífica contra la violencia que afecta a las mujeres, la pobreza y la discriminación, a través de una labor arriesgada y generosa".
Adzuba confesó que no esperaba ser la ganadora y mostró su deseo de que el premio ayude a visibilizar este "problema mundial" que necesita la implicación de la comunidad internacional para poder multiplicar los esfuerzos contra esta lacra.
"Yo, en tanto que mujer, me preocupo de otras mujeres y espero que la gente comprenda la importancia de la lucha contra la violencia sexual", reclamó.
La periodista, amenazada de muerte desde que denunció las violaciones, torturas y agresiones que sufren las mujeres de su país, ha estado a punto de morir asesinada en dos ocasiones.
Respecto a la situación actual de la violencia sexual en la RDC, Adzuba aseguró que la situación ha mejorado en la última década, sobre todo desde 2010.
Desde entonces, explicó, se han creado instituciones y planes nacionales para evaluar y luchar contra esta lacra.
"Pero las mujeres siguen sufriendo violencia sexual. La primera forma de violencia sexual es la violencia machista, y esto no puede continuar", lamentó la congoleña.
Se calcula que, desde el inicio del conflicto en 1996, hay una media de cuarenta violaciones diarias de mujeres y niñas congoleñas que, además, suelen ser repudiadas por sus familias.
Pese a tratarse de un problema mundial, puntualizó, cada país tiene sus especificidades y por tanto, la problemática debe abordarse de forma diferente.
En opinión de Adzuba, la comunidad internacional puede ayudar a las mujeres apoyando la democracia en países como la RDC, Palestina o Irak, con el objetivo de poner fin a las situaciones de conflicto.
Nacida en Bukavu en 1981 y licenciada en Derecho, Caddy Adzuba trabaja en la actualidad en Radio Okapi y es miembro de la Asociación de Mujeres de Medios de Comunicación del Este de Congo.
Gracias a esa asociación se han llevado a cabo distintas alegaciones a la Corte Penal Internacional y al Senado de los Estados Unidos, con objeto de denunciar la violencia sexual que sufren las mujeres congoleñas.
También es la presidenta de AFIDEP, una asociación que trabaja con niños y niñas abandonados y perdidos y con mujeres desmovilizadas, que habían sido reclutadas por las milicias y posiblemente violadas.
3-IX-14, efe, lavanguardia