"Desaparición de una oenegé", Toni Coromina

El año 2002, los vicenses Ferran Erra y Sílvia Casanovas crearon Yanapi, una pequeña asociación no gubernamental de ayuda a la infancia en El Alto (Bolivia)... La novedad es que el próximo año pasará a ser autónoma y contará íntegramente con un equipo de profesionales bolivianos. Durante diez años Yanapi ha sido subvencionada por más de un centenar de socios catalanes, con sus cuotas y el dinero generado a través de conciertos, actividades culturales, subastas y venta de lotería; y también por instituciones catalanas y bolivianas. A partir de ahora vivirá del dinero bolivianos y de los productos que la asociación comercializa,...

Hace nuevo años entrevisté a Erra, un visionario que me sorprendió con sus palabras: “La finalidad de las oenegés tendría que ser tender a su desaparición. Si de aquí a diez años la implicación directa desde Cataluña continúa, querrá decir que nos hemos equivocado. Cuanto antes se olviden de nosotros, mejor”. Según Erre, “algunas oenegés son asistencialistas y se perpetúan para mantener la estructura y los sueldos de la propia organización, que no por solidaridad”. Y añadía: “Un negocio. Para muchos, ser voluntario en una oenegé es un modus vivendi. No somos paternalistas ni hacemos ninguna caridad. Tampoco queremos fomentar la cultura de la mendicidad”.

8-XI-11, Toni Coromina, lavanguardia