nos tratan, electoralmente, como a estúpidos a tutelar

dossier sistemas y procesos electorals

https://image-store.slidesharecdn.com/cc8ef903-6f02-46db-a5ef-1a0668341cc2-original.jpegda envidia observar que en el Reino Unido no haya limitaciones para realizar sondeos electorales, incluso el mismo día de la votación.

La restrictiva ley que tenemos aquí todavía nos trata como a niños de párvulos que no tienen criterio y deben ser tutelados para evitar que les engañe cualquier malvado hombre del saco. Aquí está prohibido publicar sondeos durante la última semana de la campaña electoral. Y pobre del que se le ocurra manifestarse o informar de la actividad política la víspera del día de la votación porque puede acabar sentado en el banquillo de los acusados y juzgado penalmente.

La campaña electoral es el momento más adecuado para debatir y confrontar ideas y es cuando los ciudadanos buscan más información y contraste entre las distintas propuestas de los partidos. Pues bien, es durante estos quince días cuando los medios de comunicación están vigilados y coartados en su libertad de información por una ley prehistórica y carca que aplica una especie de tribunal inquisidor que se llama Junta Electoral. A ese estamento acuden en masa, cual delatores o chivatos, partidos y particulares para volcar todo tipo de denuncias que, a menudo, demuestran impotencia, frustración y venganza.

Y, mientras tanto, las redes sociales sirven de vía de escape a esta absurda limitación y dejan en evidencia una ley que pide a gritos una reforma más amplia de la que los partidos abordan.

11-V-15, E. Sierra, lavanguardia