el caso Palme continúa encallado al cabo de 30 años (pero la fiscal es “optimista”)

La policía sueca se mostró ayer “optimista” sobre la resolución del asesinato del primer ministro socialdemócrata Olof Palme, del que se cumplen 30 años el domingo, a pesar de que no hay avances en la investigación. “Soy optimista. Pero no es ningún secreto que no se ha señalado a nadie como sospechoso”, dijo la fiscal Kerstin Skarp en una rueda de prensa.

Resultat d'imatges de olaf palmeMás de 10.000 personas han sido interrogadas y 133 han asegurado ser el asesino. El caso ocupa 250 metros de estanterías en la comisaría central de Estocolmo, con 87.000 documentos. El grupo investigador, de seis miembros, sigue con las pesquisas sin fecha límite después de que en el 2010 el Parlamento aboliera el plazo de 25 años para la prescripción.

El inspector Hans Melander admitió que las balas encontradas están en mal estado y que sería difícil relacionarlas con el arma usada, si apareciese. La imagen de un sospechoso elaborada a partir de datos de testigos y distribuida tras el asesinato es “posiblemente errónea”, dijo Melander, que pidió a la población que no contacte a las autoridades con informaciones vinculadas a la imagen.

Palme fue asesinado de un tiro por la espalda un viernes por la noche al salir de un cine acompañado por su mujer, Lisbet. Iba sin escolta, a petición propia. Christer Pettersson, delincuente común, fue condenado en 1989 a cadena perpetua tras ser señalado en un reconocimiento por la viuda. Pero Pettersson, que falleció en el 2005, fue absuelto en segunda instancia por falta de pruebas.

La investigación se concentró en los primeros meses en el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), pista que luego resultó carecer de base sólida. Debido a la proyección internacional de Palme, se habló también de los servicios secretos sudafricanos, el Chile de Pinochet o incluso la CIA, sin descartar enemigos internos como la extrema derecha o un grupo de militares o policías.

26-II-16, efe, lavanguardia