Madrid y Barcelona, irrespirables

Resultat d'imatges de madrid contaminaciónLa Comisión Europea dio ayer una última oportunidad a España y otras grandes economías europeas para evitar acabar en los tribunales y ser condenados a pagar cuantiosas multas por no proteger adecuadamente la salud de sus ciudadanos al mantener niveles de contaminación atmosférica superiores a los que marca la normativa comunitaria. Los países afectados tienen diez días para presentar compromisos “sustanciosos” que mejoren la situación, anunció el comisario europeo de Medio Ambiente, Karmenu Vella, después de reunirse con los gobiernos de los nueve países expedientados sobre los que desde hace un año pende la amenaza de iniciar acciones judiciales que potencialmente podrían acabar con la imposición de multas millonarias.

“Lo único que puede evitar que la Comisión vaya al Tribunal de Justicia es que pongan sobre la mesa medidas suficientes para alcanzar los objetivos sin más retrasos”, advirtió Vella, poco impresionado por los compromisos presentados durante la reunión especial celebrada ayer en Bruselas, que ya se planteaba como un ultimátum.

Los plazos para cumplir las directivas europeas sobre calidad del aire se cumplieron hace tiempo y con las medidas planteadas hasta ahora la situación no se corregirá antes del 2020, sostiene Bruselas.

El área metropolitana de Barcelona es uno de los puntos negros del mapa europeo de mala calidad del aire para los que Bruselas reclama medidas contundentes para reducir los niveles de contaminación por dióxido de nitrógeno (NO2). También el municipio de Madrid incumple la directiva comunitaria por el mismo motivo, mientras que las localidades de Avilés (Asturias) y Villanueva del Arzobispo (Jaén) superan los límites legales de partículas finas PM10.

“Es un problema que pone en riesgo vidas humanas”, recalcó Vella, que lamentó que la “sensación de urgencia” en los gobiernos para atajar el problema no siempre sea evidente. Cada año, 400.000 personas mueren de forma prematura en la Unión Europea como consecuencia de la contaminación atmosférica que produce el tráfico, la industria o la agricultura. “Según algunos, ya hemos esperado demasiado tiempo” para emprender medidas judiciales; “no podemos esperar más y así se lo he dejado claro a los ministros”, señaló Vella, que hasta ahora ha defendido que era mejor buscar soluciones prácticas en lugar de simplemente dejar el tema en manos de los jueces.

La secretaria de Estado de Medio Ambiente, María García, insistió en que en España no hay “un problema generalizado de contaminación” como sí se da en otros países expedientados sino un problema ­limitado a “determinadas zonas geográficas bien acotadas”. García subrayó que las competencias en la materia son regionales y locales y reclamó a los ayuntamientos de Barcelona y Madrid que intensifiquen sus esfuerzos para mejorar la calidad del aire.

Más contundente, la ministra de Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, reclamó a Podemos que “asuma sus responsabilidades” en materia de calidad del aire y trabaje por reducir la contaminación en Madrid y Barcelona, los dos únicos problemas que, a su juicio, tiene España en cuanto a emisiones. Juantxo López de Uralde, portavoz de Podemos, denunció en cambio un “problema de calidad del aire generalizado” que afecta “al 94% de los españoles”.­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­