sabotaje de facto a los niños superdotados (y al futuro del país)

Resultat d'imatges de AEST superdotados niñosUn total de 27.133 escolares de toda España están considerados con altas capacidades intelectuales, según los últimos datos disponibles, correspondientes al curso 2016-17, de los que más de 11.500 son de Andalucía, la comunidad en la que más funcionan los programas para detectar a los alumnos superdotados.

Tras Andalucía, las comunidades con más alumnos con altas capacidades detectadas son Murcia (3.698), Madrid (2.190) y Canarias (2.122), mientras que Cataluña ocupa el undécimo lugar, con 417.

El Ministerio de Educación y Formación Profesional ha publicado recientemente estos datos en los que se refleja el número de alumnos con altas capacidades desde Educación Infantil de segundo ciclo hasta Bachillerato y Formación Profesional de grado superior.

En la base de datos «educabase» del Ministerio de Educación se encuentran los datos del alumnado con altas capacidades detectado por comunidad autónoma, y detallado según provincia, sexo y nivel de enseñanza.

Resultat d'imatges de AEST superdotados niñosLa psicopedagoga, experta en altas capacidades y coordinadora del grupo de investigación en altas capacidades del Colegio de Pedagogos de Cataluña, Mónica Fernández, explicó que los datos no reflejan que los alumnos andaluces sean más capacitados que el resto de españoles sino que «son la evidencia de que en algunas comunidades los programas para detectar a los alumnos con altas capacidades funcionan, y en otras no».

La Asociación Española para Superdotados y con Talento (AEST) denunció el pasado mes de enero que los chicos y chicas con altas capacidades no están recibiendo la atención educativa que establece la Lomce, que los considera como «alumnos con necesidad específica de apoyo educativo».

Esta asociación explica que, al estar transferidas las competencias en materia educativa, las comunidades son las encargadas de la identificación y atención de estos alumnos, a través de los equipos de orientación educativa y psicopedagógica y los colegios, por lo que no existe un protocolo común de identificación y atención.

Mónica Fernández ha lamentado que en Cataluña «no se aplique el protocolo que existe para la detección de los alumnos con altas capacidades», por lo que «se les niega la atención específica que requieren».

Ni los profesionales que forman los Equipos de Asesoramiento y Orientación Psipedagógica (EAP), ni los docentes «están suficientemente preparados», ha asegurado la especialista, que ha añadido que «clama al cielo que en los planes de estudio de ninguna facultad de educación catalana se estudien las altas capacidades de manera específica y que no exista ningún posgrado específico».

A pesar de que la administración catalana «es consciente del problema y muestra cada vez mayor sensibilidad» con el tema de las altas capacidades, la realidad es que «la falta de presupuesto frena iniciativas y los recursos se siguen orientando a los niños con dificultades», ha lamentado Fernández.

Los estudiantes que por su manera más rápida y profunda de pensar «no se adaptan a los estándares del sistema educativo, también necesitan apoyo en la escuela, como evidencia que el 33% de estos alumnos acaba en abandono escolar por desmotivación», ha sentenciado la experta.

https://www.laverdad.es/murcia/murcia-segunda-autonomia-20180903124916-nt.html

"Me aburro..." es la frase más repetida por Miguel, de 10 años. Miguel tiene inquietudes poco comunes para un niño de su edad, ya que le interesa la astronomía y la zoología. Además, Miguel tiene un cociente intelectual de 130, pero sus padres temen que acabe, como el 68% de los niños superdotados, en fracaso escolar. Una juez de Madrid ha reconocido su derecho a una atención educativa específica.

En cada aula puede haber un niño con alta capacidad intelectual o un talento específico, aunque muy pocos están identificados y complementan su formación.

Pequeños genios

Enrique es uno de ellos. Estudia segundo de ESO, pero además pasa algunas tardes en la Escuela de Ingenieros Agrónomos, donde realiza una investigación sobre Edafología, o en la de Arquitectura, donde estudia el impacto de terremotos en los materiales de construcción, y tiene 12 años.

El 2% de la población, unos 300.000 alumnos españoles, según los estudios, tiene potencialmente altas capacidades, pero apenas unos 3.000 están reconocidos por el sistema educativo, con medidas de flexibilización o aceleración de cursos.

Desmotivados y sin hábitos de trabajo

Y muchos se desmotivan, rinden poco, se aislan y, al llegar a la adolescencia, sin hábito de trabajo, suspenden o abandonan los estudios. El fracaso escolar entre estos 'cerebros' es "superior al 68,3%", asegura Marta Eugenia Rodríguez de la Torre, directora de Sapientec, que imparte cursos de formación preuniversitaria a medio centenar de menores seleccionados por la Asociación Española para Superdotados y con Talento (AEST) y becados por la Politécnica de Madrid (UPM).

Las asociaciones de padres critican la demora en identificar a estos alumnos y aplicar la Ley, que establece adaptaciones curriculares para su progresión.

La batalla de Miguel

La batalla de los padres de Miguel empezó cuando tenía cinco años. El pequeño caminó muy pronto, sin gatear. "Tenía un vocabulario amplio, distinto. A los dos años conocía el nombre de más de 200 animales. A los tres, hablaba de la muerte, aprendió a leer antes que sus compañeros y se expresaba como un 'catedratiquillo', comenta su madre.

Pero Miguel lloraba y lloraba por ir al 'cole', no jugaba con niños de su edad, y sus padres, Olga y Marco, buscaron ayuda.

La psicóloga de su colegio en Fuenlabrada (Madrid) les alertó de su capacidad intelectual, y en la AEST le reconocieron como un niño superdotado que "no estaba integrado, que sufría". Otra evaluación psicológica privada determinó su "ansiedad cognitiva y desajustes afectivos", por lo que lleva dos años en tratamiento.

La familia solicitó en 2004 a la Comunidad de Madrid una valoración completa del pequeño, y los Equipos de Orientación Educativa y Psicopedagógica (EOEP) determinaron, según su madre, que, aunque su cociente intelectual era elevado, "no tenía persistencia en la tarea escolar", indispensable para recibir atención específica.

La primera sentencia favorable

"No entraba en los parámetros que marcaban, pero el niño estaba mal, y algo había que hacer...", añade Olga. Y acudieron a los tribunales. La titular del Juzgado 24 de Madrid, tras analizar los informes públicos y privados sobre el menor, reconocía en marzo su derecho a medidas educativas especiales por sobredotación intelectual, avalada por equipos no oficiales, y condenaba a la Administración a aplicarlas.

Es la primera sentencia favorable en la Comunidad, según la presidenta de la AEST, Alicia Rodríguez Díaz-Concha.

La Consejería de Educación ha recurrido y alega que la evaluación del niño "es competencia exclusiva" de los Equipos de orientación educativa psicopedagógica (EOEP), "que no consideran que tenga esas necesidades especiales", y que "un informe privado no puede modificar esa evaluación".

El niño "va mejorando, aunque sigue sin querer ir al colegio, poniéndose triste", afirma la madre. "No queremos que sea un Premio Nobel, queremos que sea feliz".

Más de 3.000 no identificados

En el curso 2005-2006, últimos datos disponibles, el Ministerio de Educación tenía identificados 3.020 alumnos con sobredotación intelectual, según datos facilitados. De ellos, 87 cursaban Educación Infantil, 1.807 Primaria, 976 Secundaria, 149 Bachillerato y uno FP de Grado Medio. Un tercio (970) en centros privados y el resto (2.050) en públicos.

Más de una cuarta parte estudiaba en Andalucía (836 alumnos), seguido de Madrid (473).

Jóvenes investigadores

Reconocidos por informes públicos o privados, hasta medio centenar de estos chicos, todos con un cociente superior a 130 -nivel de sobredotación- asisten gratuitamente, hasta julio, a cursos de formación e innovación científica en escuelas de la Universidad Politécnica, adaptados a sus capacidades y forma de aprendizaje.

Enrique, el que realiza una investigación sobre la composición de los suelos agrícolas y los cultivos más convenientes, y otra sobre sismología y materiales de construcción, es el más pequeño.

Está en segundo de ESO y "debería estar en segundo... pero de carrera", explica la profesora y creadora del programa, Marta Eugenia Rodríguez de la Torre, una de las más altas capacidades, con un cociente de 218, capaz de conectar bien con ellos.

Son capaces de "interrelacionar datos a siete u ocho bandas", agrega la profesora. Aprenden de manera distinta, hay que provocar que piensen y resuelvan. "Su velocidad de procesamiento de datos no va con la repetición, cogen las cosas al vuelo. No pueden estar copiando de una pizarra, se mueren de asco, ellos hacen una fotografía mental de cualquier cosa".

Tienen una edad cronológica, tercia la presidenta de AEST, "pero su edad mental está muy por encima. No se entienden con sus compañeros, no tienen los mismos intereses ni las mismas normas", y pueden llegar a la hiperactividad, depresión, enfermedades psicosomáticas, bulimia o anorexia.

Pero no hay equipos suficientes para atenderlos en la escuela, y después de gastarnos el dinero en informes privados -entre 300 y 1.200 euros- la Administración no los admite", concluye Alicia Rodríguez.

http://www.rtve.es/noticias/20080517/aburro-68-ninos-superdotados-fracasa-deja-estudios/55910.shtml