los españoles, cada vez más campeones europeos en quedarse en casa de los padres
Actualmente, la edad media para abandonar el hogar familiar se aproxima a los 31 años, tres más que hace una década. El porcentaje de jóvenes de entre 20 y 24 años emancipados apenas alcanza el 8% frente al 30% de la UE y entre los de 24 y 29 años, el 63% vive aún con sus padres, un 6% más que en 2009.
Así lo indica el Índice Sintético(ISDJC-2018), elaborado por el Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud de la Fad en el marco del ProyectoScopio, centrado en la recopilación y obtención de datos para el análisis de la realidad y socialización juvenil. El índice está elaborado a partir de datos relativos a educación, empleo, emancipación, vida (mortalidad, fecundidad, accidentes y suicidios) y uso de las tecnologías y en él se ofrece una fotografía fija que permite comparar de manera transversal el estado de la juventud española con la europea y también entre comunidades autónomas.
El resultado del índice es descorazonador, porque pese a la recuperación económica, la realidad es que los jóvenes españoles siguen encontrándose a la cola en el índice general: la posición 35 de 39 del ranking, sólo por delante de Grecia, Bulgaria, Italia y Rumanía. España ocupaba el puesto 36 en el 2017.
Esa mínima mejoría se explica en los buenos datos obtenidos en el manejo y uso de las tecnologías, en la educación (el nivel formativo sigue aumentando) y en la salud, aunque en este punto los autores del informe reconocen que esto tiene que ver en parte con la permanencia en el hogar familiar, donde el cuidado de los progenitores mejora la calidad de vida del joven.
La mala posición española en el ISDJC 2018 tiene que ver fundamentalmente con los resultados obtenidos en las variables de empleo y emancipación que lastran el resultado global del índice. Si bien en empleo tiende lentamente a mejorar, en cuestiones de emancipación la brecha parece agrandarse en 2018 aún más.