5/7-II, Barcelona, The Influencers 2009

The Influencers 2009

5 - 6 - 7 de febrero

Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona
Carrer de Montalegre 5, Barcelona

Llega el capítulo número 5 del proyecto The Influencers, un festival que se dedica a explorar armas no convencionales de comunicación. A lo largo de estos años, ha sido definido como galería de proyectos inclasificables, investigación sobre la guerrilla de la comunicación, muestra de ciencia ficción en el presente, y hasta talk show que no se ve en la tele; pero, en el fondo, The Influencers es simplemente un laboratorio de ideas: un think-tank que durante tres intensos días se dispone a entrelazar historias de tergiversación, manipulación y transformación de elementos vivos de las culturas contemporáneas. Sigue leyendo...

The Influencers 2009 ha sido posible gracias a...


 

La imagen incisiva

En una sociedad que ya no se altera ante nada, parece tarea imposible suscitar ninguna conmoción en el espectador. Vivimos en la más hiperbólica de las realidades. Observamos cómo el adalid del progresismo - casi del buenrollismo-,Obama, toma las riendas del mundo, a la vez que aceptamos la más grotesca ofensiva militar como otro capítulo de la sociedad espectacular. Y todo a la vez: lo deglutimos como si fuera ese simulacro hiperreal que ya vaticinó Baudrillard.

Y nos quedamos tan anchos.

En un mundo en que el concepto Amnistía Internacional es concebido por el inconsciente colectivo 2.0 como un correo spam en nuestra cuenta de e-mail, conceptos como interferencia cultural - cultural jamming-y guerrilla de la comunicación cobran un protagonismo especial. No tanto por su capacidad de incidir como de simbolizar, de poner en evidencia.

La quinta edición de The Influencers, que se celebrará en el CCCB desde mañana, 5de febrero, y durante tres días, es un evento que "se dedica a mostrar las armas no convencionales con las que cuenta la comunicación", y vuelve a traer a colación la naturaleza intervencionista de proyectos y acciones que buscan romper las fronteras entre el arte - la representación-y la política - la acción-. La imagen y el audiovisual funcionan, en este sentido, como "herramientas tácticas de intervención en un escenario complejo, el de las sociedades de la información", observa Bani Brusadin, uno de los tres responsables del festival. "Se trata de herramientas tácticas porque el audiovisual no es un fin, sino una de las maneras de provocar el efecto deseado. No hay nada más alejado de todos los formalismos típicos del mundo del arte, sobre todo de las artes visuales".

El cine de activistas anómalos, el intervencionismo en los mass media,la machinima (la utilización de videojuegos para crear animaciones con ánimo narrativo) o la puesta en circulación global de vídeos de la acción provocativa son algunos ejemplos de cómo los influenciadores se sirven del audiovisual. Siempre como medio, pocas veces como fin. El audiovisual "es sólo un código expresivo más (de los participantes del festival), junto a la palabra y el cuento, o la acción y la performance, como organizadores y conocedores pretendemos fundir cada uno de estos tres códigos en uno", ediciones anteriores, activistas como The Yes Men, el grupo que practica la corrección de identidad, esto es, la usurpación de la identidad para mostrar el reverso del problema a través de la sátira, y a veces, hasta la solución, presentó sus acciones televisivas. En breve se pondrá en circulación la película del colectivo, The Yes Men fix the world,en la que vuelven a poner en evidencia a todos los actores del sistema. El colectivo Reverend Billy & The Church of Stop Shopping, conocidos activistas antitodo y consumados performers, también explota el filón de la sátira a través del documental. Otros como Eddo Stern y los propios comisarios del evento, mostraron las posibilidades de la machinima como lenguaje interactivo. "El videojuego es un ejemplo cristalino de interacción del espectador con la obra creada", aseguran.

En la presente edición tres nombres destacan en el apartado de la imagen. Julius von Bismarck, los checos Ztohoven, y Blue, el intervencionista italiano que explora las posibilidades del grafitti. "En estos dos últimos casos, lo que consiguen es que sus acciones audiovisuales no se queden en lo visto en la pantalla", inciden. Sus acciones buscan la profundidad del mensaje desde la pantalla de televisión o "una pantalla analógica, como se podría definir el espacio urbano". Los vídeos de Blue (vistos más de 5 millones de veces en YouTube), son animaciones hechas a partir de complejas escenas dibujadas en los muros callejeros, que reivindican el espacio público como lugar de creación.

Ztohoven es un colectivo que logró infiltrarse en la señal de la televisión checa y colocar una supuesta explosión nuclear en uno de los partes meteorológicos. Definida como realidad mediática por los propios interesados, la acción consiguió el efecto deseado: que se hablara del asunto en Europa, provocando la denuncia del canal televisivo. Luego desestimada por el juez porque no la consideró como entretenimiento público.

Von Bismarck viene a presentar Fulgurator, un novedoso e incisivo sistema que revierte el uso de la cámara fotográfica. La cámara Fulgurator no retrata lo real sino todo lo contrario, dicen. Es quizá la acción más sutil de todas las que se presentan en el festival. Colocando un flash detrás de la película, la Fulgurator proyecta su imagen al exterior, que sólo puede ser percibida por otra cámara. La imagen se cuela en la intimidad sin hacer ruido, sin ser detectada. Von Bismarck actúa desde la más extrema discreción, como cuando proyectó sobre el atril del discurso de Obama en Berlín la imagen de un crucifijo.

4-II-09, Jaime Casas, cultura/s/lavanguardia