Daniel Cohn-Bendit, (aún) transnacional líder europeo liberal-libertario

Un joven alemán pelirrojo, radical y descarado, sacudió hace más de cuatro décadas la sociedad francesa encabezando la revuelta estudiantil de Mayo del 68. Hoy, con 64 años a cuestas, el mismo joven agitador ha vuelto a provocar un seísmo político en Francia, al llevar a los ecologistas a convertirse en la tercera fuerza y amenazar la hegemonía socialista en la izquierda. Daniel Cohn-Bendit fue el domingo, junto a Nicolas Sarkozy - cuyo partido, la UMP, acabó en cabeza con el 27,9% de los votos-, el gran vencedor de las elecciones europeas.

Al frente de una compleja coalición verde, Europe Ecologie, Dany el Rojo consiguió lo que nadie - ni él mismo-había imaginado en sus más atrevidas ensoñaciones: lograr un 16,3% de los votos y empatar técnicamente con el PS (16,5%), al que batió claramente en la región de París por 20,9% a 13,6%, dejando al portavoz del PS, BenoîtHamon,sin escaño. "Hoy es el Día D del ecologismo político", declaró la noche electoral en medio del delirio.

El triunfo de Europe Ecologie debe casi todo a Cohn-Bendit, que prefirió el reto de presentarse en Francia en lugar de buscar cómodamente en Alemania su reelección al Europarlamento, donde se sienta desde 1994. Su papel ha sido fundamental para construir una gran coalición con personalidades diversas - desde el altermundista José Bové a la ex juez Eva Joly, que instruyó el caso Elf- y un rosario de grupos no siempre bien avenidos. Y para conducir esta pequeña galaxia al triunfo hablando sólo de Europa.

Icono revolucionario reconvertido, según propia expresión, en un "liberal-libertario", que reivindica una socialdemocracia verde y abomina de la añeja jerga marxista, Cohn-Bendit ha representado en estas elecciones una imagen renovada, moderna, de la izquierda. Precisamente lo que el PS, embarcado en un retorno a las esencias - y con Ségolène Royal temporalmente aparcada- es incapaz de hacer. El líder de Mayo del 68 se encuentra hoy más cómodo reivindicando la economía de mercado que muchos dirigentes de la calle Solférino.

Los socialistas franceses deben en parte su derrota al carisma de Cohn-Bendit. Aunque también, y sobre todo, a sus propias carencias: Martine Aubry, elegida primera secretaria en noviembre pasado, ha suspendido a este respecto su primer examen electoral y las críticas le empiezan a volar desde todas partes. Aunque, a diferencia de Michel Rocard - destituido tras su derrota en las europeas de 1994-,su silla no parece estar hoy en peligro.

Lo mismo ha sucedido con el centrista François Bayrou, cuyo descalabro - el Movimiento Demócrata ha obtenido un mísero 8,4%- ha demostrado que el antisarkozismo no basta para construir una alternativa creíble.

Dirigentes del PS y el MoDem, así como el líder del Frente Nacional, Jean-Marie Le Pen, han atribuido una parte del éxito de los verdes al estreno mundial, el viernes - a dos días de la votación-, del documental Home,de Yann Arthus-Bertrand. Con un marcado mensaje ecologista, la película fue emitida por la televisión pública, para escándalo sobrevenido de los derrotados.

9-VI-09, Ll. Uría, lavanguardia