el disidente cubano en huelga de hambre Guillermo Fariņas, ingresado en hospital

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A las 10 y 35 hora local de Cub,a 16 y 35 hora local de Suecia, fue trasladado de urgencia en grave estado el Licenciado Gullermo Fariñas (foto). El Periodista Independiente Carlos Serpa Maceira, reportó a Misceláneas de Cuba diréctamente desde Santa Clara en los momentos en que este hecho se producía. En el mismo contacto telefónico la redacción de Misceláneas de Cuba contactó con la Dama de Blanco Laura Pollán, quién habló con Fariñas minutos antes de perder el conocimiento. Escuche este reporte aquí.

Enlace al artículo:
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=26046


Guillermo Fariñas

3-III-10, e-misceláneas de Cuba

El periodista dissident cubà Guillermo Fariñas ha estat traslladat aquest dimecres a un hospital de la província de Santa Clara després que aquest perdés el coneixement, després de mantenir una vaga de fam i set durant vuit dies en protesta per la mort del pres de consciència Orlando Zapata.

Licet Zamora, portaveu de l´opositor, ha informat a Europa Press que Fariñas ha estat traslladat a l´Hospital Provincial Asnlado Miliar Castro sobre les 10.45 hores (16.45 hora catalana) després d´haver quedat inconscient mentre el metge Ismael Iglesias li feia una revisió general.

"Ha perdut el coneixement mentre el doctor Iglesias l´estava examinant, llavors hem decidit portar-lo en un cotxe cap a l´hospital perquè li donin el tractament que necessiti", ha comentat Zamora.

Fariñas es trobava en el seu vuitè dia de vaga de fam i set i "ja estava bastant deshidratat i tenia la pressió molt baixa", ha relatat la portaveu, en recordar que fa dos dies el seu metge havia dit que en un màxim de 48 hores l´organisme del periodista independent podria entrar en col·lapse.

Aquesta era la vaga de fam número 23 que feia el dissident en contra del Govern de Raúl Castro, i dies enrere havia deixat clar que no ingressaria en un hospital fins que no perdés el coneixement.

3-III-10, ep, vilaweb

Ocurrió por unas horas lo que todos temían pero él buscaba. En el octavo día de su huelga de hambre y sed en protesta por la muerte del preso político Orlando Zapata y para reclamar la excarcelación de 26 reclusos enfermos, el disidente Guillermo Fariñas hubo de ser ingresado en el hospital provincial Arnaldo Milian de Santa Clara (a 270 km de La Habana), después de haber perdido el conocimiento.

El paciente recuperó la consciencia y pudo regresar a su casa al cabo de unas horas, una vez se le había suministrado suero por vía intravenosa para paliar su deshidratación.

El opositor cayó desmayado poco antes de las 11 de la mañana (17 horas en España), cuando el doctor Ismael Iglesias lo examinaba. El primer parte médico, facilitado por fuentes opositoras, señalaba una crisis de hipoglucemia o bajada de azúcar en sangre como causa del desfallecimiento.

El psicólogo y "periodista independiente", de 48 años, se encontraba muy depauperado y débil a causa de su negativa a ingerir cualquier alimento o líquido desde el pasado 24 de febrero: el día siguiente de la muerte del preso Orlando Zapata, de 42 años, también negro y albañil de profesión. Es la vigésima cuarta huelga de hambre que Fariñas protagoniza desde mediados de los años noventa. La más dramática aconteció en el 2006 para demandar el acceso libre a internet en la isla. Fueron siete meses entrando y saliendo del hospital. La acción le dejó secuelas que ahora pueden agravar este ayuno.

En la entrevista que nos concedió en la noche del martes, el disidente afirmó que sentía dolores en las articulaciones, el abdomen y los riñones, la cabeza..., "en todo el cuerpo". Fariñas indicó que uno de sus objetivos era demostrar que "Zapata no murió por casualidad" o circunstancias aisladas en un caso singular, sino que respondió a "una generalidad de mal trato a los presos". Y señaló que también él sufrió torturas cuando, en 1996, estaba recluido en la cárcel de Valle Grande.

El disidente quería ahora "inmolarse" para que "la llama de Zapata no se apague". Tan determinado estaba a morir, dijo a La Vanguardia horas antes de perder la consciencia, que no había llegado a plantearse la posibilidad de abandonar: "Ni se me ha pasado por la cabeza", aseguró.

Fariñas tenía previsto su traslado al hospital, una vez que la pérdida de nutrientes le hiciera perder el conocimiento. Su madre, la enfermera jubilada Alicia Hernández, lo vigilaba con ayuda de un médico disidente y varios doctores enviados por el Gobierno. La mujer estaba preparada para el ingreso hospitalario que ayer, en el coche prestado por unos vecinos mientras esperaban la ambulancia, hubo de llevarse a cabo.

Los cuidados que le suministraron en el Arnaldo Milian permitieron que, ya de tarde, Fariñas regresara a casa, todavía muy débil. Dada su relativa recuperación gracias al suero, no había razón para que siguiera hospitalizado, decidieron los médicos. La crisis fue un primer y serio aviso.

Guillermo Fariñas, apodado Coco, está casado y tiene una hija de ocho años. Militó en la Unión de la Juventud Comunista, estudió en la URSS y fue soldado de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, pero con el tiempo - según declaró en su día-se fue desencantando de la revolución. En 1989, con motivo del fusilamiento del general Arnaldo Ochoa, se convirtió en disidente. En la actualidad escribe en el blog Cubanacán Press y forma parte del Foro Antitotalitario Unido.

De otro lado, los cuatro presos que también iniciaron una huelga de hambre tras la muerte de Zapata, y a los que Fariñas intentó disuadir, han optado por abandonar la protesta. El último en hacerlo, anoche, fue Fidel Suárez, que cumple una pena de 20 años en una prisión de Pinar del Río.

4-III-10, F. García, lavanguardia