el fraude electoral imposibilita la vía democrática

Una semana después de las elecciones legislativas, las denuncias por fraude se acumulan peligrosamente y aún quedan cuatro grandes provincias donde recoger quejas. Hasta el pasado jueves, la Comisión Electoral había recibido más de 3.000 denuncias por falsificación, soborno a funcionarios electorales, compra de votos, amenazas de violencia física, detenciones ilegales y corrupción. El propio hermano del presidente Karzai, Ahmed Wali, está bajo sospecha. Todo indica que los triunfadores son de nuevo los intermediarios políticos, cuya presencia deslegitima la democracia que la comunidad internacional intenta instaurar en Afganistán. 26-IX-10, ep, lavanguardia