Un triunfo de Ollanta Humala no sólo asusta al establishment peruano. El Gobierno chileno también ha mostrado su preocupación y el propio presidente Sebastián Piñera ha reconocido que una victoria de Humala podría empeorar las relaciones entre ambos países, que actualmente litigan en La Haya por una porción marítima limítrofe. En el pasado, el ex militar ultranacionalista se mostró muy beligerante contra Chile, con quien Perú mantiene una rivalidad histórica que data de la guerra del Pacífico, a finales del siglo XIX. 8-IV-11, lavanguardia