necesaria transparencia de la casta partitocrática

- La Casta. El increible chollo de ser político en España , youtube, 9´ 19´´
- La Casta. El increible chollo de ser político en España , youtube, 2´ 28´´

Sugerencias del chef. De primero se pueden escoger, por ejemplo, espaguetis con anchoas, que salen al módico precio de 1,60 €(¿serán del Cantábrico o de L´Escala?). Como plato fuerte, un emperador a la plancha (3,55 €) . De postre, unas tartas del bufet (1,74 €) . Hay que añadir por supuesto el servicio (no muy valorado: apenas 0,52 €desde luego el camarero se merecería un mejor trato, pero estamos en tiempos de crisis) y la bebida, no especificada, por 67 céntimos.

Así pueden comer, cada día, los senadores del Parlamento italiano (cuya retribución mensual, entre sueldo, dietas y reembolso gastos llega a unos 20.000 euros al mes) según la carta del restaurante oficial, ubicado en Palazzo Madama. El menú, que ha trascendido en internet, ha suscitado un alud de comentarios por parte de los internautas. Justo cuando el Gobierno anunció un doloroso ajuste para levantar a su maltrecha economía, los políticos no parecen dispuestos a dar ejemplo.



En Italia el legislativo, entre la Cámara de los Diputados y el Senado, roza los mil parlamentarios, con un coste de 26 euros por habitante al año, tres veces más que el Reino Unido. El país transalpino cuenta con un número de onorevoli (honorables, el título de los diputados) desorbitado: el 86% más que Alemania, país con una población superior.

Tampoco las cámaras italianas destacan por su eficiencia: Cámara y Senado desempeñan prácticamente la misma función legislativa, lo que técnicamente se llama "bicameralismo perfecto", con lo que el tiempo de aprobación de una ley, a diferencia del resto de democracias parlamentarias, se duplica.

Si se suma el número de las personas que trabajan en los distintos niveles de los gobiernos central y autonómicos, se llega casi a 500.000 personas. Una casta,según la jerga el país, que no tiene intención de apretarse el cinturón. El vicio es antiguo y abarca a todas las instituciones. Existen ayuntamientos de tan sólo 30 habitantes, con sus propios órganos y departamentos.

Pero el derroche alcanza incluso las altas esferas. El palacio del Quirinal, sede de la presencia de la República, tiene un presupuesto cuatro veces superior al de Buckingham Palace.



Hace unas semanas, un topo, antiguo trabajador de la Cámara, filtró en internet los privilegios de la clase política. Así, los ciudadanos supieron que los diputados también cuentan con servicio de peluquería exclusivo (el barbero cobra 11.000 euros al mes, un sueldo comparable al del vicepresidente de EE. UU.), entradas gratuitas a eventos y descuentos de todo tipo. Y todo esto por trabajar, en promedio, dos días a la semana. "Los parlamentarios italianos deberían reducirse el sueldo un tercio, no tanto para ayudar a las cuentas públicas, cuanto para ayudarse a sí mismos y que el país no les considere como una casta de inútiles parásitos", afirman desde el Instituto Bruno Leoni, que ha publicado un estudio sobre el tema. " Tenemos que intervenir con mayor incisión sobre los costes de la política", reconoció el ministro de Economía, Giulio Tremonti. ¿Y si empezáramos por el restaurante?

13-VIII-11, P.M. Sandri, lavanguardia