la OCDE considera caro e inútil repetir curso

Repetir curso es caro –para el país– y apenas sirve de nada –al alumno–. Esta es la tajante conclusión de un estudio realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) sobre el impacto de la repetición de curso en los resultados escolares hecho público ayer. La OCDE, que agrupa a los treinta países más desarrollados del mundo, aboga por revisar este sistema –así como la transferencia de los alumnos con dificultades a escuelas especiales– y dar más autonomía a los centros.

El análisis de los expertos de la OCDE, realizado a partir del último informe PISA correspondiente al 2009, constata una relación directa entre repetición de curso y fracaso escolar. “Los países que muestran un nivel de repetición elevado son igualmente aquellos donde los alumnos muestran menos competencias”, subraya el estudio, donde se calcula que “alrededor del 15% de la diferencia de calidad entre los países de la OCDE son imputables a las divergencias en el nivel de repetición”.

Como muestra de esta correlación, los expertos señalan que países como Corea, Japón o Noruega, donde ningún alumno repite curso, son justamente los que mejores resultados obtienen en el PISA. En cambio, los países que se sitúan en cabeza en cuanto al número de repetidores –como Francia, Luxemburgo, España, Portugal o Bélgica– obtienen resultados más bien mediocres. “La relación entre el medio socioeconómico de los alumnos y sus resultados es igualmente más marcada en los países con fuertes niveles de repetición de curso, independientemente del nivel de riqueza nacional”, añade el estudio. El sistema de repetición de curso agravaría pues, según la OCDE, las desigualdades sociales en el seno de la escuela.

En los países de la OCDE, la media de alumnos de 15 años que han repetido curso al menos una vez es del 13%, siendo más marcado en primaria (7%) y en el primer nivel de secundaria (6%) que en el segundo de enseñanza media (2%). Con un 35% de repetidores, España es uno de los países europeos donde esta situación es más acusada, sólo superado por Francia y Luxemburgo.

Si la repetición sistemática de curso no parece contribuir a erradicar el fracaso escolar es, en cambio, una opción con un elevado coste económico. “En Bélgica, España y Holanda, este coste representa al menos el 10% del gasto anual en primaria y secundaria, y el coste unitario puede alcanzar, e incluso sobrepasar, los 11.000 dólares [unos 7.700 euros] por alumno”, calcula el informe, “La repetición de curso de los alumnos engendra costes, particularmente la financiación de un año suplementario de formación del alumno, pero también el coste para la sociedad de retardar al menos un año la entrada de este alumno en el mercado laboral”.

Los expertos de la OCDE llegan a parecidas conclusiones cuando se trata de analizar los resultados escolares en aquellos países donde los alumnos con dificultades –ya sean de aprendizaje, ya sean disciplinarios– son trasladados y reagrupados en centros especiales, lo que sucede especialmente en Austria, Bélgica, Grecia y Luxemburgo.

14-VII-11, Ll. Uría, lavanguardia

Los países en los que la tasa de repetidores era la más alta, eran también aquellos en los que sus alumnos obtuvieron los peores resultados en las pruebas de PISA de 2009 y un 15 % de esos malos resultados se atribuyen precisamente al fenómeno de la repetición, destacó la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

Además, allí donde hay más repetidores, se da una mayor asociación entre malos resultados y los grupos socioeconómicos más desfavorecidos.  El porcentaje medio de alumnos que habían repetido en la educación primaria o secundaria en la OCDE era en 2009 del 13 % de media, pero superaba el 25 % en Holanda (26,7 %), Bélgica (34,9 %), Portugal (35 %), España (35,3 %), Luxemburgo (36,5 %) y Francia (36,9 %).

También superaron ese umbral del 25 % otros países asociados al informe PISA: Perú (28,1 %), Trinidad y Tobago (28,8 %), Panamá (31,8 %), Argentina (33,8 %), Colombia (33,9 %), Uruguay (38 %), Brasil (40,1 %), Túnez (43,2 %) y Macao (43,7 %).

En el extremo opuesto, la repetición no existía en Japón, Corea del Sur o Noruega, y los repetidores eran menos del 3 % en Islandia (0,9 %), Eslovenia (1,5 %), Taiwán (1,6 %), Azerbaiyán (1,7 %), Kazajistán (1,7 %), Montenegro (1,8 %), Serbia (2 %), Reino Unido (2,2 %), Croacia (2,8 %) y Finlandia (2,8 %).

Pero además de la ineficacia académica, repetir tiene un alto costo por la necesidad de financiar un año suplementario de la formación de un alumno, pero también el retraso en su salida al mercado de trabajo.

Los autores del estudio, que han cifrado esos costos, calculan que llegan a suponer máximos del 13  % de los gastos de educación en Bélgica, del 11 % en Holanda, del 10 % en España o del 8 % en Alemania, frente a menos del 2 % en una docena de países.

En términos monetarios, supone más de 13.000 dólares por alumno en Bélgica, más de 12.000 en España o 10.000 en Holanda comparados con los menos de 2.000 en República Checa, Polonia, Estonia, Eslovaquia, Dinamarca, Finlandia, Reino Unido, Eslovenia, Islandia y, por supuesto, Noruega, Corea y Japón.

El estudio también pone en evidencia que los países en los que se transfieren alumnos a otros centros por sus flojos resultados escolares, problemas de disciplina o necesidades pedagógicas específicas tienen resultados académicos globales desfavorables.

En concreto, más de un tercio de las diferencias en las notas de PISA de unos países a otros tiene que ver con esas transferencias, que "tienden a favorecer una segregación socio-económica" y a concentrar a los estudiantes de orígenes desfavorecidos en los centros con medias más bajas.

Austria, Bélgica, Grecia y Luxemburgo son los países de la OCDE en los que más del 40 % de los alumnos son asignados a ese tipo de centros, y lo mismo ocurre en Colombia, Indonesia, Jordania, Macao, Qatar y Rumanía.

En el extremo opuesto esta práctica se limita a menos del 3 % de los estudiantes en Australia, Finlandia, Irlanda, Islandia, Noruega, Nueva Zelanda, Portugal y Reino Unido.

De acuerdo con la conclusión de la OCDE, los profesores de sistemas educativos en los que se recurre abundantemente a la repetición o a la transferencia a centros especiales de los alumnos con dificultades tienen menos incitaciones para ayudarles.

13-VII-11, larazon