el prohibicionismo pone a México en manos del NarcoPoder

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El secretario de Gobernación (ministro del Interior) del Gobierno de México, Francisco Blake Mora, murió ayer al desplomarse el helicóptero en el que viajaba desde la capital del país a la vecina ciudad de Cuernavaca. Le acompañaban cuatro de sus colaboradores y tres tripulantes. Todos fallecieron, informó la portavoz presidencial Alejandra Sota.



La aeronave, un Eurocopter Super Puma del Estado Mayor presidencial que las primeras imágenes de televisión mostraron completamente destrozado, "no cumplía con el itinerario de vuelo" y por ello se activaron los protocolos de seguridad, añadió la funcionaria, que en nombre del presidente Felipe Calderón explicó que "se están evaluando todas las posibles causas que hayan propiciado este muy lamentable incidente". Sota pidió a la opinión pública que se atenga a las investigaciones de las autoridades, dirigidas por la Secretaría (ministerio) de Comunicaciones, con la intención de evitar especulaciones sobre el caso, dado que Blake Mora es el segundo responsable de la política interior mexicana que muere durante el mandato del presidente Felipe Calderón.

El 4 de noviembre del 2008, Juan Camilo Mouriño, entonces secretario de Gobernación, perdía también la vida en un accidente aéreo cuando el Lear Jet 45 que le transportaba cayó a menos de un kilómetro de distancia de la residencia oficial de Los Pinos.

Visiblemente afectado, el presidente compareció luego ante los medios y dijo que todo apuntaba a la "probabilidad de un accidente" por la "nubosidad en el trayecto".

Sin embargo, el Sistema Meteorológico Nacional indicó que las condiciones de navegación eran óptimas. Calderón precisó que el helicóptero había recibido el mantenimiento adecuado, era resguardado en los hangares del Estado Mayor y que el piloto tenía mucha experiencia.



Minutos después de dara conocer la muerte de Blake Mora, que se dirigía a Cuernavaca para participar en una reunión con todos los fiscales del país, la presidencia de la República informó que Calderón suspendía su agenda oficial del día y del fin de semana, que incluía la cumbre de la APEC en Hawái y la de América del Norte con los presidentes de Estados Unidos y Canadá.

En la arena política, las reacciones fueron de consternación y cautela. El Congreso mexicano guardó un minuto de silencio, mientras parlamentarios de distintos partidos pedían esperar a que acabe la investigación. Los llamamientos a la prudencia cobran especial relevancia por la proximidad de las elecciones en el estado de Michoacán, que se celebran el domingo en un clima de fuerte tensión por la violencia del crimen organizado y en las que la hermana del presidente, María Luisa Calderón es candidata.



La desaparición de Blake Mora, de 45 años, se produce también con el horizonte muy cercano de las elecciones presidenciales del mes de julio, en las que debía encargarse del área política. El joven secretario de Gobernación, que asumió el cargo en julio del 2010, había desplegado una gestión de perfil discreto y logrado establecer puentes de acuerdo con la oposición. También tenía a su cargo el proceso de diálogo con las víctimas de la guerra contra las mafias del narcotráfico que ha dejado en México más de 40.000 muertos desde que se inició, en diciembre del 2006.

12-XI-11, E. Sabartés, lavanguardia

La trágica muerte del secretario de Gobernación de México, Francisco Blake Mora, en un accidente de helicóptero del que se desconocen las causas complica todavía más la delicada coyuntura política que vive el país, inmerso en una espiral de violencia por la guerra contra el narcotráfico que ha dejado más de 40.000 muertos. Y coincide con la precampaña de las elecciones presidenciales del próximo mes de julio. Se trata de un enorme desafío de gobernabilidad para el presidente Felipe Calderón, cuyo final de mandato se antoja tan sombrío como la imagen que proyectó, de hombre abatido al borde de las lágrimas, cuando el viernes por la tarde confirmó la desaparición de su colaborador ante las cámaras de televisión.

Calderón no sólo pierde a su brazo político en el núcleo duro del gabinete que combate al crimen organizado, sino también al responsable del diálogo del Gobierno con los demás poderes del Estado y los partidos, a pocos meses de la sucesión presidencial.



Blake Mora fue, además, el cuarto titular de la cartera de Gobernación de los últimos cinco años. Por remodelación de equipo o por muerte, los cambios constantes muestran una preocupante falta de continuidad en la conducción de la política interior. Un vacío con el que el presidente también deberá gestionar las muy delicadas elecciones de este domingo en Michoacán, donde su hermana Luisa María compite por el gobierno local tras una convulsa campaña electoral marcada por el asesinato de un alcalde, el secuestro de encuestadores y la renuncia de una docena de candidatos amenazados por las mafias de la droga. ¿El adelanto de lo que puede suceder en las presidenciales del 2012?

En su comparecencia ante los medios, Calderón dijo que las condiciones del clima en la zona donde cayó el helicóptero en el que viajaba Blake con otros siete acompañantes hacen pensar en la probabilidad de un accidente. Sin embargo, anunció una minuciosa investigación para conocer con precisión las causas del siniestro en el que no hubo supervivientes. Las indagaciones son cruciales para contrarrestar las sospechas de la escéptica y desconfiada sociedad mexicana. Dudas quizás infundadas pero inevitables porque el caso tiene dos precedentes: las muertes en sendos accidentes aéreos del secretario de Gobernación Juan Camilo Mouriño, en el 2008, y del secretario de Seguridad Pública Ramón Martín Huerta, en el 2005.