´el secreto está en el profesorado´ (et al.), Xavier Melgarejo

el secreto está en el profesorado (et al.)
Xavier Melgarejo
, psicólogo escolar, doctor en Pedagogía y director del colegio Claret de Barcelona:
-El secreto está en el profesorado, entrevista de Mercè Beltran, lavanguardia, 30-V-05.
-Las bases del éxito, lavanguardia, 2-X-05.
-El caso de Finlandia, lavanguardia, 14-V-06.


El secreto está en el profesorado
El psicólogo y pedagogo Xavier Melgarejo desentraña en su tesis doctoral el ¿milagro¿ educativo finlandés.

Los buenos resultados que obtienen los alumnos finlandeses respecto a otros de países desarrollados no son una novedad. Ya hace catorce años, cuando empezaron a detectarse las dificultades en comprensión lectora de los estudiantes españoles de primaria y secundaria, los finlandeses eran los mejores del mundo, y eso que en ese país los niños y niñas no aprenden a leer hasta los siete años.

Hace unos años, el psicólogo y hoy doctor en Pedagogía Xavier Melgarejo empezó a bucear en los entresijos del sistema educativo finlandés en busca del factor o factores esenciales que explicaran las razones de sus buenos resultados. Tras trece años de trabajo, Melgarejo encontró respuestas a sus preguntas y en febrero de este año las hizo públicas en la lectura de su tesis doctoral en Blanquerna (Universitat Ramon Llull), El sistema educativo finlandés: la formación del profesorado de primaria y secundaria obligatoria, por la que obtuvo un cum laude unánime del tribunal.

El experto explica que existen tres ámbitos desde los que se potencia la educación y que inciden de manera especial en la competencia lectora de los alumnos finlandeses. El primero es la familia (con fórmulas distintas), "que se considera la primera responsable de la educación de los hijos" y que recibe importantes ayudas del Estado para poder armonizar la vida laboral con la familiar. El segundo ámbito es la potenciación por parte de las instituciones sociales o culturales (no escolares) de las diferentes dimensiones educativas, entre las que destaca la gran red de bibliotecas y sus dotaciones. El tercero es el ámbito puramente educativo.

Melgarejo sostiene que para que el sistema funcione hay tres piezas que tienen que encajar: el subsistema familiar, el subsistema escolar y el sociocultural. "En España, en lugar de rodar juntos se enfrentan. Nuestro sistema se calienta porque no todo gira al mismo tiempo. La política familiar de ayudas es nefasta; el subsistema sociocultural no funciona, no hay bibliotecas...".

Pero lo que realmente diferencia a Finlandia del resto de los países de la OCDE es "su extraordinario proceso de selección y formación de los docentes de educación primaria y secundaria". Para acceder a la licenciatura de profesor de primaria, los aspirantes superan dos procesos previos de selección y "son los mejores los que pasan a ser docentes". Tras 6.400 horas de formación estudio -en España son 1.500- los aspirantes a docente deben realizar una tesina como proyecto final de investigación, mientras que el profesor de secundaria, tras los estudios de especialización, debe superar distintas pruebas para acceder a la facultad de Educación. Y, una vez allí, el futuro profesor de secundaria debe cursar estudios pedagógicos de más de 1.400 horas-estudio (en España no son más que entre 100 y 130).

Melgarejo desarrolla en profundidad este y otros aspectos y propone una serie de medidas para mejorar la competencia lectora de los estudiantes españoles, como transformar la diplomatura de Magisterio en unos estudios de licenciatura; selección mucho más exigente del profesorado de primaria y secundaria; política clara de ayuda a la mujer con hijos, y potenciación de la red de bibliotecas públicas y escolares.


Las bases del éxito

Finlandia es el país de la OCDE que ha obtenido mejores resultados en el estudio PISA 2003 y el primer lugar, en competencia lectora de sus estudiantes, en todas las pruebas comparativas internacionales realizadas en los últimos catorce años. Por otra parte, en estos mismos estudios, España obtiene siempre resultados mediocres. ¿Qué puede explicar el excelente rendimiento de los alumnos finlandeses?

Los objetivos de la educación en Finlandia persiguen principalmente lograr una educación de excelencia, con una alta cohesión social. Los finlandeses juzgan esencial la equidad de los ciudadanos en el acceso a la sociedad del bienestar y el derecho a su libertad individual en un clima de responsabilidad. El sistema educativo debe ser eficiente, y no sólo eficaz, reflejando estos valores. El dominio de la lengua es uno de los elementos esenciales de la cohesión social y, al mismo tiempo, garantiza su supervivencia como cultura. Desde esta perspectiva, el esfuerzo en educación es una prioridad nacional.

La adquisición de una alta competencia lectora tiene que contemplar el trabajo coordinado y sostenido en el tiempo de tres grandes estructuras que se complementan en el proceso. Estas estructuras son: la familia, la escuela y las estructuras socioculturales de apoyo educativo. En el caso finlandés, las tres estructuras se coordinan y se potencian realizando en cadena una parte del trabajo educativo.

LA FAMILIA ES EL PRIMERO de estos ámbitos. Domina en Finlandia el valor luterano de la responsabilidad y disciplina sobre la propia vida. La familia finlandesa se considera la primera responsable de la educación de sus hijos. En los hogares finlandeses, los niños observan como padres y madres son ávidos lectores de periódicos y libros, y acuden con ellos a las bibliotecas con frecuencia. Por otra parte existen mecanismos del Estado que garantizan la compatibilidad laboral y la vida familiar, especialmente para las mujeres. Las ayudas a la infancia y a la familia permiten que sólo el 4% de los niños finlandeses vivan en situación de pobreza (12% en España).

El segundo ámbito es el de las instituciones sociales o culturales no escolares. En Finlandia destaca la gran red de bibliotecas y sus dotaciones. Son muy accesibles a todos los ciudadanos, se encuentran conectadas entre sí y con profesionales preparadísimos. Además, por su tradición luterana, Finlandia refuerza el valor de la propia responsabilidad sobre los creyentes y promueve la necesidad de la lectura personal de la Biblia. Por otra parte, la televisión y el cine ofrecen siempre toda su programación en la lengua original. Los niños deben aprender a leer rápidamente los subtítulos para entender los programas (películas incluso dibujos animados).

Finalmente, el tercer ámbito educativo es la escuela. Los niños finlandeses entran en sistema escolar a los siete años y no aprenden a leer hasta entonces. La escuela finlandesa de educación primaria y secundaria es generalmente una escuela pública muy descentralizada. Se imparten proporcionalmente menos horas de lengua que en España. La disciplina es alta. La atención a la diversidad se efectúa atendiendo a los diversos intereses con el trabajo de dos profesores por aula. En todos los centros hay una comida gratuita al día para todos los alumnos. Todos estos ámbitos son muy parecidos en todos los países nórdicos, pero muy diferentes a los de España.

PERO LO QUE REALMENTE diferencia a Finlandia del resto de los países de la OCDE, especialmente de los nórdicos, es su extraordinario proceso de selección y formación de los docentes. Para acceder a la licenciatura de profesor de primaria, los aspirantes deben sufrir dos procesos previos de selección. El primer proceso se lleva a cabo en una unidad de evaluación centralizada (Universidad de Jyväskylä), uno de cuyos criterios es que el expediente del candidato debe superar el 9 de media en sus estudios de bachillerato. Una segunda selección se hace en las facultades de Educación. Entre otros aspectos se evalúa la competencia lectora y escrita de los aspirantes, la capacidad de empatía y comunicación de los mismos, habilidades artísticas, musicales y de alta competencia matemática. Menos de un 9% de los aspirantes puede acceder a la formación como profesor de Educación Primaria en las facultades de Educación. Tras 6.400 horas de formación-estudio (en España son 2.000 actualmente y 1.500 hasta hace pocos años), los estudiantes deben redactar una tesina obligatoria como proyecto final de investigación. El profesor de secundaria se forma en las facultades de su especialización (matemáticas, literatura, etcétera). Una vez finalizada esta especialización debe también superar diversas pruebas de acceso para entrar en la facultad de Educación (capacidad de empatizar, de explicar, etcétera). Una vez superada esta prueba, el futuro profesor de secundaria debe seguir estudios pedagógicos de más de 1.400 horas-estudio (en España son entre 100 y 130 horas). Una vez ya formados, los docentes son seleccionados en las escuelas por los directores de éstas. Dichos directores son a su vez seleccionados por el Consejo Municipal. Los directores de las escuelas de primaria sitúan en los primeros cursos aquellos profesores más competentes de todo el claustro. Si un municipio cierra su escuela, los profesores deben volver a buscar trabajo por sí mismos en otra localidad.

Finlandia es el único país de la OCDE con este sistema tan exigente para la función docente. Las razones por las que se tomaron dichas medidas en la década de 1970 son históricas y políticas.

Finlandia es un país que aspira al liderazgo mundial en innovación. Diversos gobiernos han considerado que su supervivencia social, cultural y económica en un mundo globalizado depende de planificar una sociedad del conocimiento. En este diseño, la escuela es esencial como cuna y plataforma para cumplir este objetivo.


El caso de Finlandia

Para los finlandeses, sus niños y niñas son el tesoro de la nación, su bien más preciado. Desde este planteamiento, se esmeran en el cuidado de su salud y su educación, y no como áreas separadas sino coordinadas. En Finlandia funcionan unos hospitales materno-infantiles, responsables sanitarios tanto de las madres como de sus hijos/ as desde el periodo del embarazo y hasta que el niño cumple siete años. Uno de los objetivos de dichas instituciones es la prevención y detección de todos aquellos trastornos que pudieran afectar al aprendizaje del menor, siendo todos los servicios hospitalarios, que incluyen terapias de reeducación y medicación, gratuitos. Así pues, una de las claves del tratamiento de estos trastornos, la detección precoz, se produce antes de entrar en la escuela con la posibilidad de iniciar el tratamiento a temprana edad.

A partir de los siete años, la escuela asume la responsabilidad sanitaria de los alumnos (incluyendo las dos visitas anuales al dentista programadas por el propio centro escolar). Cada escuela dispone de una enfermera y, semanalmente, recibe la visita de un pediatra. En casi todos los centros hay psicólogos escolares trabajando que cuentan con apoyo externo. Todo ello se complementa con unos servicios sociales municipales muy eficientes, coordinados con las escuelas y hospitales.

Asimismo, la formación inicial de los maestros y la de los profesores de secundaria incluye el conocimiento de los trastornos de aprendizaje, las adecuadas estrategias de reeducación y las prácticas bien diseñadas. Los profesores de prácticas suelen ser los mejores especialistas del país, principalmente ante dichas dificultades. Cuando hay que atender a alumnos con necesidades educativas especiales, el director del centro educativo tiene autonomía suficiente como para gestionar tanto el currículum interno como el personal necesario.

En comparación, nuestros alumnos sufren verdaderas carencias, tal como indica la doctora Anna Sans. ¿Cuántos de estos recursos tenemos en nuestro país? ¿Por qué hay barrios, pueblos y ciudades cuyos alumnos no tienen acceso a los mismos recursos sanitarios infantiles? ¿Por qué hay comunidades, como Catalunya, que no disponen de equipos de orientación en todos los centros? ¿Por qué no son ninguna prioridad ni la selección previa a la universidad ni la formación inicial del profesorado de primaria y secundaria en España? ¿Por qué no es obligatorio que el profesorado en activo deba reciclarse en este tema? ¿Estamos dispuestos a pagar un sistema como el finlandés, o sólo pediremos sus prestaciones? ¿Están los derechos de los trabajadores por encima del derecho de niños y niñas? ¿Qué lugar queremos que ocupe en nuestra sociedad la atención a la infancia?