Wallström & Bonino
La campaña '50/50' ha inaugurado una página web (www.5050democracy.eu) con la que buscan apoyos en la lucha por la igualdad de género en la política y en la que animan a votar "a mujeres y a partidos que coloquen la igualdad entre hombres y mujeres en el centro de su programa". Además de la ministra Aído, la organización informó en un comunicado que cuenta con el apoyo de más de 100 personalidades de la política europea, incluidos el secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, y la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega.
En el debate celebrado este martes también participaron la vicepresidenta de la Comisión y comisaria de Relaciones Institucionales, Margot Wallström; la vicepresidenta del Senado italiano y ex comisaria europea Emma Bonino; la europarlamentaria Zita Gurmai; y la vicepresidenta de la Eurocámara, Diana Wallis.
Wallström & Bonino
Todas ellas asistieron al acto para respaldar esta iniciativa que, entre otros objetivos, persigue alcanzar el compromiso de los diferentes partidos políticos nacionales de los Estados miembros para que presenten listas paritarias a las próximas elecciones europeas. También piden que los gobiernos nacionales nombren a un hombre y a una mujer cada uno como candidatos a ocupar una cartera de la Comisión Europea, de modo que el próximo presidente pueda formar un Ejecutivo comunitario paritario.
El sistema de cuotas para la paridad en los puestos de responsabilidad es "el mejor punto de partida" para garantizar la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, según defendió hoy en Bruselas la ministra de Igualdad, Bibiana Aído. Es necesario que exista una "representación equilibrada" de la sociedad para poder desarrollar una política que incluya una "visión completa" de los problemas de toda la ciudadanía, añadió.
"Para garantizar la presencia de ciudadanas en las instituciones, hoy por hoy y como medida provisional por supuesto, son necesarias las cuotas y son necesarias las leyes (de igualdad). Es verdad que esto no garantiza la permanencia de las mujeres en las instituciones pero sin duda son el mejor punto de partida", aseguró Aído durante su participación en el lanzamiento de la campaña '50/50. No puede haber democracia europea moderna sin igualdad de género'.
El Lobby Europeo de Mujeres presentó este martes en Bruselas una campaña con la que pretenden "aumentar la presencia de mujeres en el más alto nivel de la política europea", de cara a las próximas elecciones al Parlamento Europeo en junio de 2009 y la formación de un nuevo Ejecutivo comunitario en las mismas fechas.
En el curso de una mesa redonda previa a la presentación de la campaña, la ministra de Igualdad aseguró que el mundo no puede construirse "con una única mirada" y que favorecer un poder político paritario tiene un "efecto positivo", al servir como "espejo" en el que pueda mirarse el resto de las instituciones sociales y económicas.
"Nuestras instituciones democráticas deben parecerse lo más posible a la sociedad", continuó Aído, quien destacó que las mujeres "no somos un colectivo, sino que somos la mitad de la sociedad".
A juicio de la ministra de Igualdad, "el hombre ha sido socializado para el poder", mientras que las mujeres siguen estando en el ámbito de las decisiones como "recién llegadas". Sin embargo, apuntó, "ahora se descubren como valores clave para el liderazgo" características tradicionalmente asociadas a la mujer. En este sentido, puso como ejemplo, entre otros valores, la capacidad de crear equipo, de generar ámbitos de participación, ser flexibles, disponer de un enfoque de aprendizaje continuado y potenciar las relaciones interpersonales.
La presencia de mujeres en el poder supone "llevar nuestros intereses, inquietudes y necesidades" al plano político y ampliar la agenda para incluir leyes que benefician "a todos los ciudadanos, no solo a las mujeres", en materias como la violencia de género, el trabajo gratuito en el hogar, la conciliación o la corresponsabilidad, argumentó.
Además, Aído se refirió a la responsabilidad de los partidos políticos para favorecer una representación equilibrada en los altos cargos y defendió el sistema de cuotas que introdujo el PSOE dentro de su partido, lo que, dijo, favoreció un "clima favorable por parte de la sociedad hacia la democracia paritaria".
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