España cañí -58: La Muela, de subvencionar viajes al Caribe a no pagar su único autobús

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La Muela, de subvencionar viajes al Caribe a no pagar el único autobús que le une con Zaragoza

Fue la envidia de todo Aragón. El viento soplaba a favor de La Muela, localidad situada a las puertas de Zaragoza, gracias a los cientos de aerogeneradores que se instalaron y provocaron un crecimiento espectacular, tanto en número de habitantes como en servicios y tren de vida de sus vecinos. Su alcaldesa durante dos décadas, María Victoria Pinilla, del PAR, se dedicó a sembrar molinos de viento cuyos beneficios utilizó para practicar un urbanismo salvaje y malvender gran parte del suelo de la localidad. A cambio se quedaba con suculentas comisiones. La corriente se puso en contra el 18 de marzo de 2009, día en el que la exedil fue detenida, acusada de nueve delitos y corruptelas urbanísticas junto con otras 19 personas más, entre ellas su marido, su hijo, otro concejal y numerosos empresarios y técnicos vinculados al urbanismo del municipio. La fiesta se acabó y su sucesora, Marisol Aured, del PP, heredó 25 millones en deudas. Casi 5.000 euros por vecino.

La plaza de toros de La Muela La plaza de toros de La Muela simbolizó la ‘fiesta’ de la anterior década: costó casi dos millones de euros cubrirla.

El primer parque de molinos de viento se instaló en 1987. El pueblo tenía entonces 800 habitantes, ahora supera los 5.000. El viento y sus aerogeneradores dieron tanto dinero que su anterior Gobierno levantó una plaza de toros cubierta (dos millones de euros) inaugurada por Julio Iglesias y donde se exhibieron los mejores carteles del momento. Pinilla puso a disposición de sus vecinos tres museos, el de la Vida, el del Aceite y el único museo del Viento del mundo; un gran auditorio (3,2 millones) y un centro deportivo de 19 millones de euros con capacidad para una localidad cinco veces más grande que La Muela.

En el pueblo, considerado como uno de los de mayor calidad de vida de España, se llegaron a costear viajes a República Dominicana, Finlandia, México y Canadá, por citar alguno de los lugares paradisíacos que subvencionó el ayuntamiento. También había para los jóvenes: los que quisieran ir a la Universidad, contaban con una beca anual y un programa de Trabajo para el verano. Los ancianos, a los que el Consistorio pagaba viajes a Benidorm, recibían una subvención dependiendo de su salario para ingresar en la residencia municipal.

La resaca de la fiesta que no desaparece

De tirar la casa por la ventana a bajar las persianas porque la fiesta se terminó. La deuda que el anterior Ejecutivo local deja a este pueblo situado en plena A-2, a medio camino entre Madrid y Barcelona, asciende a 25 millones de euros e inmuebles cerrados porque cuesta más mantenerlos que no utilizarlos. El 2012 llegó con una subida generalizada de los servicios municipales: los muelanos pagan el doble por la tasa de basuras; un 40% más para las guarderías y ya no hay ayudas públicas para los ancianos que ingresen en la residencia del pueblo. Ya no hay siquiera dinero para pagar el servicio de autobús a Centrovía, la única línea directa con Zaragoza.

Ahora la actual alcaldesa trata de poner en orden la diferencia entre lo que abonan los usuarios y el coste real del mantenimiento. El Consistorio sigue buscando fórmulas con la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) para desbloquear la deuda y hacer viable el funcionamiento normal y ordinario del Ayuntamiento. Aured, que reconoce que el pueblo hoy se aqueja de “todos los problemas posibles”, únicamente pide otro milagro: restablecer la convivencia con las instituciones e ir diluyendo “poquito a poco” la herencia recibida de la anterior alcaldesa, que junto con su ex esposo Juan Antonio Embarba y sus hijos posee hasta una mansión en una lujosa urbanización de República Dominicana, además de un chalé en Sotogrande (Cádiz) y varios pisos en Madrid.

25-I-12, elnida, burbuja.info

María Victoria Pinilla

“Sabíamos que esto iba mal, pero tanto…”. Marisol Aured, la nueva alcaldesa (PP) de La Muela (Zaragoza), solo ha heredado problemas de su antecesora, Mariví Pinilla (PAR). La exregidora –imputada en varios delitos– ha dejado 24 millones de deuda en un pueblo antaño símbolo de sostenibilidad gracias al viento y sus aerogeneradores, y al que ahora cortan incluso la luz. Mientras, eso sí, Pinilla y su familia acumulaban dinero, tierras y mansiones, desde Cádiz hasta el Caribe.

El truco no podía durar eternamente. Nadie podía explicar cómo La Muela, un municipio aragonés de apenas 5.000 habitantes, tuviera una plaza de toros cubierta (dos millones de euros), un espectacular auditorio (3,2 millones) y un centro deportivo con piscina climatizada incluida (19,4 millones más). Por no contar su Aviapark de pájaros exóticos y sus tres museos: de la Vida, el Aceite y el Viento. Es verdad que con este último elemento, el viento, había llegado la bonanza: más de quinientos aerogeneradores que llevan años generando electricidad y riqueza. María Victoria Pinilla (PAR, Partido Aragonés Regionalista) sumó así mayorías sin problemas, 24 años, seis legislaturas seguidas.

Hasta que hace un par de años la policía culminó la operación Molino –destapando una trama de corrupción, cohecho y blanqueo de capitales, entre otros delitos– y la llevó a la cárcel (ahora está en libertad bajo fianza millonaria). Su cetro lo recogió, en mayo pasado, Marisol Aured (PP), que se ha topado con su herencia, 24 millones de deuda municipal: “No lo sabíamos –dice–. Era claro que iban mal las cosas, pero tener un presupuesto de 33 millones cuando se ingresan sólo seis... La situación es dramática”.

Bajo la aparente fiesta que vivía La Muela, donde los mayores del pueblo viajaban a pasar una semana gratis al Caribe o Argentina, la realidad es una deuda de casi 5.000 euros por vecino. Mariví Pinilla, que junto con su ex esposo, Juan Antonio Embarba, y sus hijos posee decenas de olivares y tres casas en su pueblo, una mansión de un millón de euros en la lujosísima urbanización Casa de Campo, de la República Dominicana –con vecinos como Julio Iglesias y Sharon Stone–, un chalé en Sotogrande (Cádiz) y pisos en Madrid, no pagó desde 2005 ni los tres euros de unos panecillos del comedor escolar municipal, según las facturas pendientes de pago a que ha tenido acceso interviú.

7-X-11, J.L. Álvarez, interviú

En La Muela está en marcha el rodaje de un «culebrón» televisivo. Y justo ahora que arranca el trabajo se ha desencadenado la operación policial «Molinos», capaz de nutrir otro guión. La alcaldesa, María Victoria Pinilla, del PAR, su hijo, su marido, su primo, el arquitecto municipal, el secretario del Ayuntamiento, empresarios y funcionarios han sido detenidos por una presunta trama de corrupción urbanística en un pequeño pueblo en el que el dinero ha corrido con abundancia durante años.

Las unidades policiales contra los delitos económicos han desencadenado una operación que convierte a La Muela en algo así como la «Marbella» maña. Entre sus ingredientes, lo siguientes: una alcaldesa cuya familia, según cuentan en el pueblo, tiene intereses económicos en el Caribe, un patrimonio floreciente y un modo de vida en el que se ha relacionado con personalidades y famosos -ahí queda, por ejemplo, la fotografía del brindis con el ex-ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, en Argentina-; unos empresarios inmobiliarios con negocios multimillonarios al alimón con el Ayuntamiento; una cascada de recalificaciones urbanísticas al calor del crecimiento experimentado por la localidad, estratégicamente situada al pie de la autovía Madrid-Zaragoza (A-2) y a 23 kilómetros de Zaragoza capital; un pueblo acostumbrado a la prosperidad, con múltiples obras públicas, viajes al extranjero para los vecinos y ayudas para estudiantes, todo con fondos municipales.
Viento y recalificaciones
La lista de edificios construidos por el Ayuntamiento en pocos años es larga: Museo de la Vida, Museo del Viento, Museo del Aceite; un completísimo centro polideportivo en el que no faltan la sauna y el jacuzzi; plaza de toros inaugurada hace seis años y por cuyo ruedo, a golpe de talonario municipal, han hecho el paseíllo las primeras figuras del toreo y también de la canción. La alcaldesa no escatimó e hizo que Julio Iglesias actuara allí en 2002.
Pinilla llevaba 22 años en el cargo cuando fue detenida, el pasado miércoles, junto a la larga lista de presuntos implicados en la trama urbanística. Durante este tiempo, el pueblo ha visto cómo el horizonte se iba llenando de aerogeneradores, molinos que dan ingresos interesantes para aquel que ve cómo le instalan uno en su finca.
Eso empezó a dar una riqueza desconocida hasta entonces en La Muela, que pronto descubrió las posibilidades del urbanismo. Llegaron las recalificaciones, la conversión de tres millones de metros cuadrados de monte en próspero polígono industrial, y un floreciente negocio inmobiliario. No faltaban compradores, gentes dispuestas a irse a vivir al lado de Zaragoza a precios más ventajosos.
Hacía años que en La Muela todo era a lo grande: las inversiones públicas, las recalificaciones, las cuentas...Un municipio que ha pasado en diez años de tener 900 vecinos a rozar los 5.000 y que, con ese censo, supera la lista de 150 trabajadores a sueldo del Ayuntamiento, cifra muy superior a lo que es normal en localidades de ese tamaño.
A Pinilla no le faltan los defensores que alaban su gestión, pero tampoco los que la critican desde hace años. Una denuncia echó raíces en la policía hace algo más de un año. Meses de escuchas telefónicas, seguimientos e indagaciones económicas han acabado en las órdenes de detención.
El escolta y su madre
Entre los detenidos figura un escolta del Gobierno aragonés, de 28 años, Antonio Royo Velilla, que solía interesarse ante la Administración autonómica por cómo iban ciertos trámites urbanísticos en La Muela. Está asignado a la seguridad del consejero aragonés de Medio Ambiente y número dos del PAR, Alfredo Boné. La madre del escolta también fue detenida, igual que un buen número de empresarios y directivos, entre ellos la cúpula de la firma inmobiliaria Aranade, con Julián de Miguel a la cabeza. Aranade comparte la gestión de multimillonarios proyectos urbanísticos con el Ayuntamiento de La Muela.
El Ayuntamiento tiene dos sociedades públicas, una para el urbanismo y otra para la cultura y el deporte. Según la oposición -PSOE y PP-, esas sociedades y las gestiones compartidas con Aranade sacan al terreno de lo semiprivado una parte de la gestión municipal, dificultando seriamente el control político.
«Hasta se venden aceras»
El presupuesto del Ayuntamiento asciende a 33 millones de euros, pero entre la Sociedad Urbanística y la Sociedad Cultural y Deportiva suman unos 14 millones más. En total, 47 millones de euros, es decir, unos 10.000 euros por vecino, un sueño para las principales ciudades. Por ejemplo, en Zaragoza capital el presupuesto sale a unos mil euros por vecino, diez veces menos que en La Muela.
«Hace años que esto se sabía, aquí se han hecho barbaridades», cuenta un vecino próximo a la política municipal que prefiere mantener el anonimato. «Aquí se ha llegado a vender un trozo de acera», indica a ABC aludiendo a irregularidades urbanísticas. Algunos vecinos dicen que se había convertido en normal el trato de favor y una suerte de «peaje» para tener vía libre en las tramitaciones urbanísticas. Carmelo Aured, primo de la alcaldesa, aparece también como parte destacada en las diligencias policiales.
Defensores de la alcaldesa
La oposición lleva tiempo quejándose de la falta de transparencia y de las trabas para fiscalizar la gestión y las cuentas. «Aquí las licencias urbanísticas se han estado dando por decreto de la Alcaldía», indica la portavoz municipal del PP, Marisol Aured, en un municipio que ha estado saliendo a unas 600 viviendas autorizadas al año.
En 2008, el interventor del Ayuntamiento pidió traslado, se fue de La Muela. Dicen los críticos con la alcaldesa que se marchó «harto de cómo se hacían las cosas».
Pero a María Victoria Pinilla tampoco le faltan defensores en un municipio en el que ha corrido la prosperidad como en muy pocos municipios de su tamaño, con una visible ostentación en instalaciones públicas y servicios municipales, cientos de aerogeneradores que dejan dinero y un gran polígono industrial en expansión. Pinilla se ha mantenido 22 años en la Alcaldía, y en las últimas elecciones -las de 2007- obtuvo siete de los once escaños que forman la Corporación. Mayoría absoluta, y holgada.
22-III-09, R. Pérez, abc.es