vivimos en un sistema de impuestos regresivos (quien más tiene, menos paga)

Agustín Bernaldo Palatchi, inspector de Hacienda, escritor. Tengo 45 años: luchar por tus sueños te mantiene joven. Soltero, pero capaz de cambiar. Nací en Barcelona: también hay inspectores catalanes. Creo que hay un más allá. Nos sobran políticos con partido y faltan técnicos sin partido. En ‘El gran engaño’ novelo el fraude fiscal.

Por qué se hizo inspector fiscal? Porque creo que sin impuestos eficientes no hay justicia social. ¿Es que hoy no lo son? Penalizan a los ciudadanos que viven de su sueldo frente a los que viven de su dinero, que pagan mucho menos.

¡Qué nos va a contar! En Catalunya llegan hasta el 56 por ciento de los sueldos más altos: es una barbaridad. Cuando una tributación que supera el 50 por ciento de un ingreso pasa a ser...

Confiscatoria: ¿cree en la curva de Laffer? ¿El tipo excesivo recauda menos? La tributación eficiente es clara y sencilla. Y hoy la nuestra es un caos de excepciones cambiantes con disparidades autonómicas que aumentan las desigualdades y pervierten las reglas del mercado y la competencia.

Este IRPF lastra el crecimiento. Y una empresa que no tributa acaba condenando a la ruina a las que pagan impuestos.

¿Por qué se ha hecho novelista? Porque siempre me ha gustado escribir, pero también porque le dije a mi equipo en Hacienda que en esta novela explicaría por ellos no sólo lo que hacemos, sino también lo que nos gustaría conseguir.

¿Están desmoralizados? Nos gustaría que el dinero público, que tanto nos cuesta recaudar, fuera invertido mejor y también contar con medidas legislativas para hacer más efectivo nuestro trabajo...

¿Quién paga menos impuestos hoy? Los muy ricos. Con montar una sicav, por ejemplo, tributan sólo el uno por ciento.

¡Yo también quiero mi sicav! No puede tener una: no es lo bastante rico.

Voy a ahorrar mucho para tener una. Requiere reunir al menos 100 inversores.

Yo le encuentro 500... Y me la monto. Esos socios suyos sólo serían mariachis.

¿ Mariachis porque desafinan? Por la ranchera: “Con dinero o sin dinero hago siempre lo que quiero”, porque son meros testaferros: unos mandados que sólo figuran.

Entonces la que desafina es la ley. Los inspectores empezamos a investigar las sicav, pero nos quitaron las atribuciones y le dieron la competencia exclusiva a la Comisión del Mercado de Valores (CNMV) para determinar si había mariachis o no,

Muchos ricos les prefieren vagos. Y los ciudadanos: o nos organizamos o perderemos aún más derechos sociales y renta frente a los amos del capital, que someten a las democracias al chantaje fiscal: sólo invierten en países que no les hacen tributar.

Habrá que protegerlos de su estupidez. Parece que sólo quieran esclavos. Por ejemplo, en la UE debemos abolir la competencia fiscal desleal de Irlanda o Luxemburgo.

Que aprovechan Google y otras tecnológicas para no pagar impuestos aquí. Debemos exigir un tipo único en toda la UE para el impuesto de sociedades y actuar por fin de verdad contra los paraísos fiscales.

¿Cuál fue su primera inspección? Perseguir el fraude en las subcontratistas de la construcción, a las que apodé nini: no pagaban ni impuestos ni Seguridad Social.

¿Cómo funcionaban? Mafias internacionales creaban una nini que se traía inmigrantes, a los que, encima, les sacaba miles de euros por un contrato.

¿Y luego se evaporaban? Les levantábamos actas que nadie pagaba hasta que solicitamos que la agencia adelantara sus actuaciones y embargara sus créditos. Y entonces algunas las pudimos cobrar.

¿Hoy siguen estafándonos? Menos, porque propusimos que en ese sector –hay otros también de difícil control– se aplicara la inversión del sujeto pasivo. Es decir, que no emitieran facturas con el IVA.

Se habrán inventado nuevas trampas. La tecnología juega a su favor. Es muy fácil. Por ejemplo, crear una empresa sin actividad y dar de alta empleados ficticios sin cotizar a la Seguridad Social para que luego cobren el paro. Es una estafa colosal.

¿Por qué no van por ellos? Cuesta poco dar de alta, pero mucho dar de baja a esas empresas, porque la ley es demasiado garantista y ampara su presunción de inocencia. Y para hallar pruebas, a la inspección de Trabajo le faltan efectivos.

¿Qué propone? Invertir la carga de la prueba: que sean las empresas nini, sin centro de trabajo, las que deban demostrar que tienen actividad.

¡Qué difícil de gestionar es el IVA! Nos lo estafan a diario por millones. Propongo sustituirlo y gravar sólo el consumo final. Los alemanes ya lo han solicitado.

¿Y el impuesto de patrimonio? Discriminatorio y antieconómico: sobra.

¿Sucesiones es doble imposición? Con tipo bajo es igualatorio: grava bienes que el heredero no se ha ganado.

El inspector Palatchi cita al billonario Warren Buffett: “Es injusto que mi secretaria pague más impuestos que yo”. Y denuncia cómo el uno por ciento de humanos que posee casi todo el capital global chantajea a nuestras democracias: si aquí me hacéis tributar, invierto en otro país. Hasta que nuestros estados, para evitar la bancarrota, nos recortan servicios e ingresos. Mientras, las multinacionales nos venden aquí, pero no pagan aquí sus impuestos. Como Google (vuelvo a pedir un día de boicot contra el buscador) y otras tecnológicas, que se van a Irlanda para pagar menos y luego a un paraíso fiscal para no pagar. Vale que nos espíen y expriman, ¡pero que paguen!

16-VII-13, Ll. Amiguet, lacontra/lavanguardia