El Algarrobico, puro, y duro, PORN

Cuando parecía que el tema de El Algarrobico, con toda su retahíla de sentencias, fallos y recursos, había llegado a su fin y la demolición del edificio era sólo una cuestión de tiempo -y de dinero, que no es poco-, otra sentencia reabre el debate y amenaza con echar por tierra todo lo construido en el ámbito judicial. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), el mismo que determinó que el macrohotel se levantó en un suelo que debía ser protegido medioambientalmente, asegura ahora que el suelo es urbanizable. La explicación: que la Junta recalificó el terreno y no informó de ello en el 2008. El TSJA, pues, ofrece dos versiones contradictorias, pero asegura que no hay que verlo así, porque ambos fallos se basan en "cartografías" diferentes. La sentencia no analiza la legalidad de la licencia de obras ni el hecho de que la construcción invade la línea de 100 metros desde la costa. Pero abre una grieta, por donde los ecologistas temen que se cuele la protección de este monstruo a orillas del mar.

26-III-14, lavanguardia

Decisión sorprendente en la larga y complicada maraña judicial en torno al polémico hotel El Algarrobico, edificado en el cabo de Gata y actualmente paralizado en espera de una sentencia definitiva sobre su futuro. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) declaró ayer que el terreno donde se asienta el establecimiento es urbanizable. Una resolución que entra en aparente contradicción con otra del mismo tribunal dictada hace dos años y que declaraba que la construcción hotelera se levantaba en zona protegida.

La decisión ha supuesto un varapalo para las organizaciones ecologistas que llevan años luchando contra la construcción del establecimiento turístico y buscando su demolición. Jaime del Val, portavoz de Salvemos Mojácar, señaló a este diario que "es terrorífico lo sucedido. Esta sentencia viene a dar la razón a los corruptos que han construido miles de edificaciones ilegales en la costa".

El Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN) del parque natural del Cabo de Gata de 1994 declaraba que el suelo donde posteriormente se construyó el hotel era urbanizable, pero la Junta de Andalucía modificó ese plan en el 2008 para declarar protegida la finca. La sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJA resolvió ayer que este cambio no es legal ya que la Junta no ofreció, ni en la memoria ni en los informes que incorporó al expediente, justificación alguna para cambiar su consideración.

El Tribunal no ve contradicción en el hecho de que, a instancias de Ecologistas en Acción, la misma sala dictara en el 2012 una sentencia diferente en torno a la cuestión, y lo atribuye a que la finca aparecía de forma diferente en la cartografía, "lo que necesariamente conduce a conclusiones diferentes entre una y otra sentencia". Por otra parte, la sentencia de ayer no entra a valorar el hecho de que el hotel invada la línea de 100 metros desde la ribera del mar que contemplaba la ley de Costas de 1988.

Aunque el fallo no afecta, en principio, al pronunciamiento decisivo sobre la legalidad o ilegalidad de la licencia de obras concedida por el ayuntamiento de Carboneras a la empresa Azata del Sol para construir el hotel, y que lleva un retraso de dos meses, la decisión ha sido un "golpe bajo", según todas las asociaciones ecologistas personadas en el caso.

Todas las organizaciones ambientalistas atribuyen lo sucedido a "presiones políticas" de las formaciones y de la propia Junta, que nunca ha tomado una posición claramente a favor de la demolición del hotel. Los políticos de la zona priman la posible creación de puestos de trabajo a la conservación medioambiental de la zona.

Jaime del Val, de Salvemos Mojácar, manifestó que "es una decisión inexplicable que allana el camino a una sentencia favorable a la empresa, con lo que toda la situación volvería al principio, pese al camino ya realizado y que se traduce en 17 decisiones judiciales contra el hotel". Del Val anunció que su organización va a presentar una querella criminal por prevaricación contra los miembros del tribunal; que recurrirán la decisión al Supremo y que va a presentar también una queja al Consejo General del Poder Judicial.

La portavoz de Greenpeace, Pilar Marcos, sospecha que se están realizando "triquiñuelas ocultas para legalizar el hotel. Esta pequeña pieza puede tener una gran repercusión sobre el pleito acerca de la licencia de obras, que es el importante". Dolores Yllescas, responsable de Ecologistas en Acción de Andalucía, comentó que su organización ha dicho en varias ocasiones que El Algarrobico no sería demolido, "porque en este país no se tira nada y parece que los miedos se van confirmando".

El vicepresidente de la promotora Azata del Sol, José Rodríguez, celebró que la justicia de Andalucía les haya dado la razón y haya reconocido que los terrenos donde se edificó el hotel eran urbanizables "en 1999, que es cuando nuestra empresa los adquirió".

26-III-14, A. S. Ruiz, lavanguardia