nada digno responsable de la candidatura olímpica Madrid 2020
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Alejandro Blanco Bravo, presidente del Comité Olímpico Español (COE) y de la Sociedad Madrid 2020, ha sido acusado de copiar su tesis doctoral referente al papel de los deportistas españoles en los Juegos de Pekín 2008. La Universidad de Vigo dio el visto bueno a la tesis e inició los trámites de doctorado hasta que otro centro universitario, la Universidad Politécnica de Madrid, denunció un posible plagio académico, según información publicada ayer en El diario.es
Alejandro Blanco preside el COE desde el 2005. Judoka profesional y licenciado en física, según su currículum, ya se había hecho pasar por doctor universitario en actos institucionales, como en la entrega del título honoris causa a Kim Jung Haeng en febrero del 2012. Entonces Blanco se vistió con toga y birrete en tonos verde chillón. La indumentaria elegida por el presidente del COE para aquella ocasión señala en los actos académicos a aquellos universitarios que han alcanzado la distinción de doctor.
Según las mismas fuentes Blanco no pertenecía por entonces a ese club; no era doctor y no le correspondía ni la toga sobre sus hombros de judoka, ni el birrete sobre su cabeza de alto ejecutivo del deporte.
La Universidad de Vigo fue alertada del presunto plagio académico de Blanco en abril del 2012, cuando varios correos electrónicos procedentes de la Politécnica de Madrid señalaban que lo que Blanco había presentado no era una tesis y además era un plagio. Sólo entonces la Universidad de Vigo optó por pedir al doctorando que completase su trabajo, en el que habían encontrado errores de contenido, metodología y procedimiento, según dichas fuentes.
Para convertirse en doctor, Blanco se apoyó en la exatleta María José Martínez Patiño, quien accedió a dirigir su tesis. El currículum de esta doctora universitaria se ha visto salpicado por la polémica en otros momentos de su carrera. Antes que docente, esta viguesa fue atleta especializada en 60 metros vallas. En 1986, la Federación de Atletismo le retiró el permiso para competir por detectar en su organismo la presencia de cromosomas masculinos. Aquello generó en los años ochenta una amplia polémica coronada con análisis realizados en Madrid y Japón en los que quedó probado que la atleta presentaba cromosomas xy, propios del sexo masculino. Finalmente, pero años después, la Federación de Atletismo dio marcha atrás y la restauró para volver a competir en su especialidad de carrera corta y obstáculos.
María José Martínez aceptó dirigir la tesis del presidente del COE después de que éste la nombrase miembro de la Academia Olímpica Española, organismo que depende orgánicamente del COE. La combinación de olimpismo y plagio académico tiene su precedente más destacado en el expresidente de Hungría, Pál Schmitt. El exmandatario húngaro, medalla de oro de esgrima en los juegos de México’68 y Múnich’72, quedó al descubierto cuando trascendió que había plagiado su tesis doctoral sobre los juegos olímpicos modernos. El 2 de abril del 2012 presentó su dimisión a la presidencia tras hacerse público el escándalo.
10-I-13, red, lavanguardia
